Boca y otros equipos de barrio en la élite: Rayo, Chelsea...
La final de Libertadores, que viaja ahora al Monumental, tiene la representación de uno de los equipos 'de barrio' más famosos del Mundo: Boca Juniors.
Al sudeste de la ciudad de Buenos Aires aparece el barrio de la Boca, al límite del sur, inundado por el color azul y oro del club de su barrio, el Club Atlético Boca Juniors.
"La mitad más uno" así se autoproclaman los bosteros que, siendo el club de barrio, siempre se ha considerado el club argentino más popular "Acá y en el mundo" como declaró su presidente Daniel Angelici.
Los de la Boca son, posiblemente, el equipo de barrio con el palmarés más amplio del mundo. Tres Intercontinentales, seis Libertadores y 26 Ligas argentinas... Así hasta sumar las 66 estrellas de su escudo (en febrero de 2018), una por cada campeonato ganado por los xeneizes.
Aunque menos exitosos, no son pocos los clubes 'de barrio' que acompañan a Boca Juniors en la élite del fútbol mundial como el Chelsea, el Rayo Vallecano, el Sankt Pauli, el Chievo Verona...
La franja de River llegó a Vallecas
No fue Boca Juniors, si no River Plate, su eterno rival, el que trajo el mayor de sus símbolos a Madrid, la franja roja que cruza su camiseta.
En la 49/50, un acuerdo del club vallecano con el Atlético de Madrid le obligó al conjunto rayista a introducir un detalle rojo en la equipación para diferenciarse así del Real Madrid. Decidieron incluir una franja roja cruzando el pecho a imagen y semejanza de River Plate, que ya triunfaba con el fútbol total de la Máquina.
El Rayo Vallecano, en otro nivel distinto a Boca Juniors, alterna durante su historia temporadas en Primera y Segunda División. Es uno de los clubes más icónicos del fútbol español por la personalidad tan propia del propio barrio que acaba en el club.
Desde hace años, se le relaciona con el activismo y la atención a las causas sociales. Desde la grada e incluyendo a la primera plantilla y entrenador evitaron el deshaucio de una vecina del barrio de Vallecas bajo el lema "Carmen se queda".
Conocido como el Matagigantes, por varias victorias históricas contra los grandes de LaLiga, Vallecas conserva ese sabor a fútbol de antaño con la grada pegada al césped y un estadio apretado al que la propia ciudad le impide crecer por uno de sus fondos.
En la actualidad, pelea por permanecer en Primera División para volver a iniciar un ciclo de temporadas en lo más alto igual que hicieron desde la 11-12 hasta la 15-16. En el Monumental y en Vallecas, la franja es sagrada.
Fútbol de Londres sin Londres
El London FC ni existe ni parece que vaya a existir en breve. Llama la atención que una de las capitales del fútbol europeo (por nivel y variedad) no tenga ningún club que le represente directamente con el nombre de la ciudad destacado en su escudo pero si cuenta con varios de los clubes más potentes a nivel nacional e internacional surgidos en relación directa con sus barrios y distritos.
El Arsenal, que nació en una fábrica de armas, llevó Woolwich en su nombre hasta 1913, nombre del distrito en el que estaba ubicado compartiendo el norte de Londres con el Tottenham Hotspur, nombre que no tiene relación directa con ninguna zona de la ciudad.
El Chelsea es 'el club de barrio' de Londres pero lejos de la definición que se suele asociar a este término, orígenes humildes, el club blue es el equipo del barrio de los más ricos de la capital inglesa. Histórico de la Primera División inglesa su éxito llegó al ser comprado por Roman Abramovich, el cual a base de fuertes inversiones le colocó en la élite europea.
El Chelsea está situado en el distrito de Fulham, nombre con el que también se bautizó a uno de los tantos clubes que aloja de la ciudad a la ribera del Támesis. Con la desaparición de Highbury, el viejo White Hart Lane y Boleyn Ground, Craven Cottage, estadio del Fulham, es uno de los pocos estadios típicos ingleses que sigue en pie en Londres.
Otros londinenses ilustres que les acompañan en la Premier League son el Crystal Palace, cuyo nombre que se debe a una construcción con motivo de una Exposición internacional celebrada en Londres y el West Ham, que lleva la palabra oeste en su nombre pero está situado en la zona este de la ciudad. Los 'hammers' son el club favorito de, curiosamente, los vecinos del East End.
Sankt Pauli, un barrio pirata a la contra del fútbol mundial
En el barrio portuario de Hamburgo, Sankt Pauli, nació el FC Sankt Pauli, un club de palmarés escaso pero que cuenta con una base de aficionados a lo largo del mundo por sus posiciones éticas.
El club se declara abiertamente ‘antirracista, antisexista y antixenófobo’ llevando a cabo campañas de visualización y solidaridad con varias de estas luchas además de ayudar constantemente a su comunidad más cercana.
La Bundesliga no la pisa desde 2011 y suele estar entre la Segunda División alemana y la 3.Liga. En ocasiones ha llegado a pasar por la Regionalliga, la cuarta categoría alemana que se compone de varios grupos separados por regiones. A nivel de gestión se mueve a la contra de las tendencias actuales. Los aficionados tienen más peso que en el resto de clubes y con capaces de obligar a que se rompan acuerdos con patrocinadores si creen que no cumplen con la línea del club. De hecho, el propio club le recriminaron al CEO de la marca estadounidense unas declaraciones a favor de Trump a través de un comunicado oficial.
Apodados 'los piratas' y enarbolando siempre la ‘Jolly Roger’ (la calavera negra con las dos tibias cruzadas sobre fondo negro), son el club rebelde por excelencia. El club más a la izquierda de Europa.
Chievo Verona: el asno volador
Un pequeño barrio de Verona, Chievo, tiene el honor de tener el equipo de barrio italiano en la categoría más alta del calcio. Nacido y viviendo casi siempre a la sombra del Hellas Verona, el Chievo explotó como equipo exitoso hace dos décadas logrando ascensos casi consecutivos desde el infrafútbol hasta la Serie A y llegando a disputar la Liga de Campeones.
“El día que haya un derbi en Verona los burros volarán” se burlaban los tifosi del Hellas de los del Chievo en referencia al asno que hay en el escudo de sus vecinos. Los del Chievo convirtieron la burla en orgullo y se hacen llamar ‘mussi volanti’, los asnos voladores.
‘Vola con noi’ es el título de su himno pero este año, sin duda, les va a costar levantarse de lo más bajo de la clasificación de la Serie A. Una sanción por maquillar sus balances económicos en las últimas temporadas les ha impedido sumar en la clasificación los tres puntos que ha conseguido con tres empates en 12 partidos. Un balance pobre para los de Verona que podrían reencontrarse la temporada que viene con sus vecinos en la Serie B.
