Cristiano es el de siempre
El portugués remontó el gol inicial de Caputo con un tanto de penalti y un golazo desde fuera del área. Cristiano ya lleva siete goles en la Serie A.
Una Juventus con doble cara ganó en Empoli gracias a un doblete de Cristiano Ronaldo: el luso, que mañana mirará el Clásico por primera vez desde lejos, ya suma siete goles en sus diez partidos de Serie A. El campeón de Italia, tras el triunfo de Manchester, olvidó así el empate casero con el Genoa y sigue dominando en su país con siete puntos de ventaja sobre el Nápoles, que mañana recibirá al Roma en el San Paolo.
En la primera mitad, los de Andreazzoli lograron lo que no pudo hacer el United de Mourinho: poner a la Vecchia Signora en apuros. El conjunto local, muy organizado, no concedía espacios en el medio, anulando el poderío ofensivo bianconero y haciendo daño con unos precisos contragolpes, que la zaga de Allegri (con Rugani en lugar de Chiellini, lesionado en el calentamiento), sufría bastante. Uno de esos valió el 1-0: Acquah se deshizo de Alex Sandro y, tras una gran carrera, centró para Caputo que le dejó el balón a Krunic y, con algo de suerte, se lo volvió a encontrar entre los píes, colocándolo en la portería con una perfecta rosca zurda desde fuera del área.
Los horribles primeros 45 minutos de la Juventus quedaron en un recuerdo en cuanto empezó la segunda parte, que el equipo turinés comenzó totalmente volcado en la mitad de campo de sus rivales. Alex Sandro y Pjanic, que golpeó el larguero, avisaron, hasta que empezó el show de Cristiano, que despertó definitivamente a los suyos con un doblete. El primer tanto llegó gracias a un penalti, bastante dudoso, por un contacto entre Bennacer (que perdió el balón en su área) y Dybala. El segundo fue, sin duda, el más bonito desde que aterrizó en Italia: un latigazo de los suyos desde los 25 metros que se coló por la escuadra. Ronaldo fue decisivo en 10 de los últimos 14 goles juventinos, con siete dianas y tres asistencias: el equipo ya gira alrededor de él.
El 1-2 le hizo cometer a la Vecchia Signora el mismo error que le costó dos puntos con el Genoa: no sentenciar y relajarse. Una actitud que consintió a los locales creer en el 2-2 hasta el 95’, encerrando a sus contrincantes en su área y obligándoles a pedir la hora. Allegri, enfurecido, se fue al vestuario antes de la última jugada de los toscanos, que por su suerte no llevó a nada: el triunfo fue mucho más sufrido de lo esperado, pero llegó.
El Torino y el Fiorentina empataron 1-1 este sábado en el Estadio Olímpico Grande Torino y siguen atascados en la Serie A italiana (Primera División), en la que no ganan desde hace dos y tres jornadas, respectivamente.
Con el argentino Giovanni Simeone en el banquillo, el Fiorentina se adelantó nada más empezar el encuentro por medio de Marco Benassi (m.2), exjugador del propio Torino, pero los locales reaccionaron y consiguieron la igualada gracias a una desafortunada acción del portero francés Alban Lafont, que marcó en propia meta, tras un disparo al poste del nigeriano Ola Aina (m.12).
A pesar de eso, Lafont reaccionó y fue determinante con tres grandes paradas para negar el gol de la posible ventaja dos veces al español Iago Falque (m.45 y m.72) y una a Lorenzo De Silvestri (m.23).
Pese a sufrir mucho, el Fiorentina dispuso de una doble oportunidad para ganar el encuentro a diez minutos del final, pero ni Simeone, que entró en la reanudación, ni el belga Kevin Mirallas supieron aprovecharla.
El Atalanta encadenó su segunda victoria consecutiva al imponerse por 3-0 en casa contra el Parma, en un partido en el que el argentino José Palomino firmó su primera diana liguera del año tras ver puerta en la fase previa de la Liga Europa contra el Sarajevo.
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