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Los porqués del caos defensivo de España ante Inglaterra

Se vio superada en el primer tiempo. Sin repliegue ni contundencia. Muy mal Ramos.  Kane jugó con libertad e Inglaterra mordió a la contra.

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Los porqués del caos defensivo de España ante Inglaterra

Inglaterra sacudió el despertar futbolístico de España con Luis Enrique. El desplome defensivo de la Selección en el primer tiempo mediatizó todo el encuentro. Quedó rebajada por su distensión general y fallos individuales de importancia, muy expuesta ante el contraataque inglés sin poder ofrecer resistencia. Desde cualquier perspectiva se vio superada con Sergio Ramos como símbolo del desastre.

La comodidad de Kane

El principal problema se focalizó en la libertad de acción de Kane. El delantero inglés comprendió que la debilidad española estaba entre líneas. Se intercaló en posiciones intermedias para intentar recibir desahogado. España siempre quiso apretar en zonas adelantadas a Inglaterra para encerrar su salida de balón, pero los de Southgate tuvieron la capacidad de encontrar a Kane. Ni Ramos ni Nacho acompañaron la presión y el jugador del Tottenham recibió casi siempre sin oposición. Esta escena se repitió, con matices, en los dos primer goles. Los centrales españoles desafinaron en las vigilancias y Kane campó a sus anchas (67% de éxito en las 21 disputas que mantuvo). Busquets tampoco barrió esa parcela al tener que ocuparse de los interiores ingleses. Southgate, como hizo ante Croacia, apostó por una defensa de cuatro hombres en lugar de cinco y engordó la medular. Busquets, Thiago y Saúl tenían tarea por delante.

El posicionamiento de los laterales

En su empeño por actuar con un bloque muy alto, los dos laterales españoles se estiraban hasta terreno inglés para achicar los espacios. Sus carriles quedaban descubiertos en muchas situaciones. Y aunque estuvieran es su sitio más común, el poder de aceleración de Sterling y Rashford les sacaba de punto. El espacio entre central-lateral fue aprovechado por Inglaterra en los tres goles. Kane habilitó los movimientos de los extremos y la selección inglesa dominó con soltura el contraataque (ocho en el primer tiempo). El Mundial denunció las contrariedades de la Selección en acciones de repliegue defensivo y el repaso de Inglaterra se ajustó a este mismo parámetro.

Las pérdidas evitables

Las facilidades que dio a España a nivel táctico también tuvieron su prolongación en errores absolutamente eludibles con la posesión. Los de Luis Enrique cometieron pérdidas que asentaron por momentos a Inglaterra en campo español. Ramos, caótico toda la noche, extravió hasta siete balones. La entrega equivocada de Busquets en el 3-0 ocasionó el desbarajuste posterior de la línea. La decisión de Luis Enrique de ubicar al mediocentro del Barcelona a la derecha de Nacho en la salida frenó el aluvión de pérdidas en el segundo tiempo, pero llegó tarde. Como España al partido.