El 'Afro-Napoli' expulsa a su capitana por alinearse con Salvini
Según el club sureño, no existe compatibilidad entre sus valores y la candidatura. Las jugadoras se amotinaron y la entidad anunció no inscribirse al campeonato.
Deporte y política viven en mundos separados y cuando se juntan, casi siempre, es por polémica. En Italia, desde ayer, se está viviendo un caso que ha partido por la mitad a la opinión pública: en Nápoles existe un equipo, el Afro-Napoli, nacido en 2009 con el objetivo de “combatir la discriminación y favorecer la convivencia entre napolitanos e inmigrantes”. Sus plantillas, formadas por locales (en el curso pasado jugó allí Diego Armando Maradona Jr) y africanos, han logrado varios éxitos a lo largo de los años hasta conseguir el ascenso al campeonato ‘Eccellenza’, la quinta división del fútbol italiano, convirtiéndose en el segundo equipo de la ciudad detrás de la SSC Napoli.
La entidad también cuenta con un equipo femenino. O, al menos, contaba, ya que el escándalo de estos días ha puesto en riesgo su futuro. Todo empezó cuando la capitana Titty Astarita anunció haberse candidato para el ayuntamiento de Marano con un movimiento que apoyaba al partido de Matteo Salvini, “Noi con Salvini”, ministro del Interior italiano y jefe de la ‘Lega’, famoso por su política de puertas cerrados a los inmigrantes y por cabalgar la ola xenófoba que está viviendo el país.
El club pidió a la jugadora dar un paso atrás y, ante su negativa, la expulsó del equipo. La decisión causó desconcierto entre las compañeras de Astarita, que se amotinaron en apoyo a su capitana y rechazaron saltar al campo en un partido de Copa Campania. El club comentó los hechos con un comunicado que anuncia la intención de retirar a su conjunto femenino: “El Afro-Napoli United nace como proyecto de inclusión e integración en una Italia multiétnica que cada día sufre discriminación y racismo – se leía – tras la decisión de nuestra capitana Titty Astarita, nos vemos obligados a no inscribir el equipo al campeonato de C1 regional. ¿Qué compatibilidad puede existir entre la administración ‘leghista’ que en Lodi le niega el comedor escolar a los hijos de inmigrantes pobres, y nosotros?”.
La medida recibió muchísimas críticas: el Afro-Napoli fue acusado de “racismo al revés” y de traicionar su proyecto de integración. “Llevo años trabajando en política con movimientos de derecha, pero no soy racista”, dijo Titty Astarita, “no quiero renunciar a mi candidatura, aunque tampoco a mi equipo. Según la directiva es un alarde alinearse en contra de la Lega”. Obviamente Matteo Salvini, siempre muy activo en las redes sociales, no perdió la ocasión para comentar el caso y lanzar su mensaje: “Los únicos racistas son los buenistas de izquierda. Dejad la política fuera del deporte”.