El Huesca se juega más que tres puntos en la matinal de hoy porque es el farolillo rojo, porque acumula cuatro derrotas consecutivas y porque todavía no ha celebrado ni un solo tanto ante su afición (sigue el partido en directo en As.com). La paciencia en las oficinas de El Alcoraz ya se han agotado y la apuesta por el novato Leo Franco sólo continuará en caso de victoria del equipo oscense.
El entrenador argentino revolucionará una jornada más a su equipo en busca de la reacción. El técnico atenderá las peticiones populares y cambiará el sistema, pasando al 4-1-4-1 como dibujo, con hasta cinco novedades en el once titular con los que el preparador intentará salvar su cabeza: Jovanovic relevará a Werner en la portería, Akapo sustituirá al lesionado Luisinho, Pulido entrará por Etxeita, Aguilera reforzará el centro del campo en detrimento de Longo y Gürler ocupará una de las bandas en lugar de Ferreiro. Una de las claves que maneja Leo Franco pasa por acercar a Melero al área con el objetivo de que florezca de nuevo la sociedad que formó con Cucho y que marcó las diferencias en Segunda.
Enfrente estará un Girona que ante su rival más asequible desde que comenzó el campeonato intentará recuperar una identidad colectiva más parecida a la idea que tiene Eusebio en la cabeza, que no es otra que tener el balón. Para ello, nadie descarta que el conjunto catalán regrese a su esquema original, el 4-3-3, a pesar de la ausencia de laterales puros en la plantilla. Si no es así, Eusebio seguirá apostando por jugar con tres centrales y dos carrileros, dando descanso a algún jugador. Aleix García podría entrar en el once y Stuani o Portu podrían dejarle un sitio a Doumbia.