La guerra Rubiales-Tebas alcanza también al fútbol femenino
Dos son los escenarios de disputa: el Convenio Colectivo y el nuevo contrato de televisión. Los derechos los gestiona la RFEF.
El fútbol femenino no va a quedar exento de la guerra abierta entre Luis Rubiales y Javier Tebas. Dos son los escenarios en los que se va a focalizar la disputa en los próximos meses: el primero, la negociación del convenio colectivo, pionero para jugadoras de fútbol en España; el segundo, los derechos audiovisuales de la Liga Iberdrola, que a día de hoy controla la RFEF.
La brega en lo que concierne a la negociación del Convenio Colectivo no está tanto en el contenido del mismo como en los plazos y en los interlocutores. La Asociación de Clubes de Fútbol Femenino, entidad que preside Rubén Alcaine, con absoluta sintonía con LaLiga que preside Javier Tebas, tiene intención desde verano de sentarse a negociar un convenio a principio de octubre con los sindicatos. De tal Asociación forman parte 69 equipos, incluidos 13 de los 16 de la Liga Iberdrola (excepto Barcelona, Athletic y Real Sociedad),
El martes, de hecho, la Asociación citó por burofax a los sindicatos AFE y Futbolistas ON a una primera toma de contacto, que se celebrará el próximo día 4 de octubre a las 11:30 horas en la sede del CSD. La Asociación también ha citado para ese día a representantes de LaLiga, RFEF y de los tres clubes de Primera que no forman parte de ella. Su intención es que todos los actores del fútbol femenino de élite estén informados y se “sientan partícipes” de las mejoras y avances a realizar.
La AFE, mientras, en las últimas semanas, ha pretendido erigirse como único interlocutor sindical y lo hace con el apoyo de Rubiales, que da prioridad máxima a la firma del Convenio y que éste se suscriba con la AFE. En este sentido, fuentes de la Asociación de Clubes de Fútbol Femenino, recuerdan que en la reunión mantenida el 27 de agosto en Las Rozas, Rubiales focalizó su discurso en firmar con premura el Convenio Colectivo para las jugadoras y que se negociara directamente con AFE. David Aganzo estuvo presente en dicha reunión por invitación de la RFEF, pero los clubes se negaron a profundizar ese día en el tema del convenio.
Burofax. AFE, después, envió con fecha de 19 de septiembre un burofax a todos los clubes de la Liga Iberdrola citándoles a una reunión en Madrid para constituir “una mesa de negociación” y aprobar “un calendario” con únicamente seis reuniones para cerrar un Convenio Colectivo que “afectará a todas las futbolistas” de Primera. Inclusive se fijaba en dicho documento la fecha del 30 de octubre para la firma definitiva del acuerdo. Curiosamente, la AFE les citó para el día 4 de octubre y también en el CSD, aunque a las 16:30 horas. En su caso, AFE no convocaba a dicha reunión a ‘Futbolistas ON’.
Los clubes que forman parte de la Asociación, que desde el pasado 20 de septiembre se “transformó en asociación empresarial” y con ello ejerce ya con rango de patronal, no respondieron, siguieron con su hoja de ruta y el pasado martes notificaron a AFE y también a Futbolistas ON su propia convocatoria, es decir, la del día 4, en la sede del CSD pero a las 11:30 horas. Desde la Asociación se recalca que la fecha del 4 había sido propuesta por ellos con antelación al burofax enviado por AFE.
Contrato de televisión. El otro caballo de batalla entre LaLiga (Asociación de Clubes) y la RFEF girará entorno a los derechos audiovisuales de la Liga Iberdrola. En la actualidad, la RFEF es la que controla tal explotación, fruto del contrato firmado en su día con Mediapro. Dicho acuerdo tiene próxima fecha de caducidad y las partes tienen mucho que negociar.
Los clubes de la Liga Iberdrola no perciben ningún ingreso directo por la retransmisión de los partidos. El acuerdo que se alcanzó estipula que Mediapro asume la producción; ello con miras a potenciar el fútbol femenino en España, darle visibilidad y opciones de captación de patrocinadores.
Pero ahora los clubes empiezan a ver posibilidades de negocio televisivo (el último Atlético-Barcelona tuvo una audiencia de 287.000) y quieren ser ellos, vía Asociación, los que negocien con Mediapro. El Atlético, a sabiendas de su potencial, es uno de los clubes que más abogan por explotar directamente sus derechos y así se lo ha hecho saber por escrito a la RFEF.