José Rodríguez: "Mourinho me decía 'te voy a hacer el gitano más famoso del mundo'"
El centrocampista de Villajoyosa recuerda en As su debut en el Real Madrid y su accidentado paso por Alemania y analiza su momento actual en Holanda.
Seis equipos distintos, cinco países diferentes y sus correspondientes culturas, cuatro cesiones y un sinfín de experiencias. A pesar tener tan solo 23 años, José Rodríguez (Villajoyosa, 1994) ya ha conocido todas las caras del fútbol. Tras jugar en España, Turquía, Alemania e Israel, el jugador más joven en debutar con el Real Madrid en Champions busca en Holanda reencontrarse con su mejor versión. Este sábado su Fortuna Sittard visitará al Ajax, club ante el que José Mourinho le dio la alternativa en Europa. "Muchos creen que ya estoy acabado, pero estoy jugando muy bien aquí", defiende en diario As un futbolista que admite haber "reconducido" su carrera.
José Rodríguez vuelve a disfrutar del fútbol en la Eredivisie. Aunque admite que "no es bueno cambiar tanto de equipo", su viaje por el mundo le ha aportado "mucha experiencia". "Ahora sé posicionarme mucho mejor y no cometo tantos errores. El entrenador me pide que ordene al equipo y aporte mi experiencia en el centro del campo. Tras mi primer partido como titular le dije a mi familia que nunca había corrido tanto para ganar pero estoy encantado, la Eredivisie y yo encajamos a la perfección", confiesa el centrocampista de Villajoyosa, que llegó a Holanda cedido por el Mainz 05 a finales de agosto.
Para jugar en el Sittard, José Rodríguez se ha bajado un 20% el sueldo: "El club ha hecho un esfuerzo en traerme y lo estoy agradeciendo. Me compensa cobrar menos y ser feliz". Es el precio que ha tenido que pagar para reencontrarse con su mejor versión, la cual yacía escondida desde el 18 de septiembre de 2016, cuando en su debut en la Bundesliga con el Mainz 05 una dura entrada sobre Dominik Kohr le puso a Alemania en contra. Su equipo incluido: "El club me sentenció y desde entonces no cuenta conmigo. Deberían haber esperado al diagnóstico de la lesión para pronunciarse, porque luego no fue tan grave. Sin saber nada dijeron que me iban a sancionar duramente y eso me hizo pasarlo mal, sobre todo por mi familia. Que tus padres escuchen que su hijo es un asesino es muy duro. Nunca he sido un jugador agresivo y a pesar de eso se me criminalizó".
"Mi carrera iba muy bien hasta que me fui al Mainz. Fue un error ir allí y lo he pasado bastante mal, porque cuando no juegas la vida te parece una mierda. Este verano hice dos meses de pretemporada con ellos y me mandaban a entrenar con el filial. Pagaron una cantidad importante por mí y sé que creen que soy buen jugador, que piensan que podría hacerlo bien, pero después de aquella desafortunada entrada no está bien visto que me pongan", añade José Rodríguez, a quien sancionaron con 10.000 euros y cinco partidos "que luego acabaron siendo más, porque no he vuelto a jugar con ellos".
El Ajax: un rival, mil recuerdos
Dos años después y una cesión al Maccabi Tel Aviv mediante, todo ha cambiado en la vida de José Rodríguez. "Ya lo he olvidado, de mis malos momentos en Alemania ya ni me acuerdo". El centrocampista valenciano volverá a encontrarse este sábado con el Ajax, equipo ante el que José Mourinho le hizo debutar con el Real Madrid en Champions. "Han pasado ya seis años y en todos sitios me recuerdan aún por eso, es increíble". Tenía 17 años y, a pesar de no ser titular en el Castilla, el portugués confió en él para el primer equipo: "En ese momento no lo disfrutas porque no sabes ni quién eres tú. Mou me decía 'te voy a hacer el gitano más famoso del mundo' y yo me reía mucho. No puedo explicar con palabras lo que sentía cuando el mejor entrenador del mundo me hablaba o me daba consejos".
De aquel José Rodríguez queda ya muy poco. "Cuando eres niño haces tonterías. Dices 'hoy me voy a tocar los huevos para joder a este entrenador que no me pone', pero en realidad lo que estás haciendo es perjudicarte a ti mismo. Luego te das cuenta que lo importante es jugar, porque cuando no juegas te da igual todo, aunque tengas todo el dinero del mundo no eres feliz. Ahora sé que hay que trabajar día a día porque las oportunidades llegan y hay que aprovecharlas". Y la suya, ahora, está en Holanda.
