Cornellà fue un salvavidas que ahora quiere ilusionar
Con 30 puntos, siete de ellos ante Barça, Madrid y Atleti. Pese a la mediocre temporada, en el estadio estuvieron en el promedio.
Maquilló en el tramo final de la 2017-18 David Gallego la anodina temporada del Espanyol incluso a domicilio, donde con Quique Sánchez Flores solo habían sumado los pericos una victoria. Pero es en Cornellà-El Prat donde se fraguó claramente el objetivo de mínimos de la permanencia. Hasta el punto de que, aunque parezca mentira, sumó más puntos el Espanyol en casa la pasada temporada que la anterior, cuando terminó octavo en LaLiga con 56 puntos. Ahora el objetivo es otro: volver a ilusionar.
30 puntos figuraron en el casillero final de Cornellà (un relevante 65 por ciento del total que suman en la clasificación), por los 29 del curso 2016-17 (que supusieron solo un 51 por ciento del total), lo que situó a los pericos dentro del promedio histórico en los nueve años de vida del actual estadio, en todos los sentidos: justo son 30 los puntos de media por temporada y ocho las victorias, las mismas que cosechó el equipo, primero con Quique y finalmente con Gallego. La diferencia con respecto al anterior radicó simplemente en que en la última temporada sumaron seis empates y cinco derrotas, lo que un año antes discurrió justo al revés.
La goleada final contra el Málaga (4-1) también maquilló el capítulo anotador, que se situaba durante toda la temporada por debajo de la media. Cerró el Espanyol con 20 goles a favor, que es su peor registro, pero que ya perpetró en las temporadas 2009-10 (la primera en Cornellà) y 2012-13. Mucho más favorable se ve el otro lado de la moneda, el récord negativo de goles recibidos: nunca habían tenido los blanquiazules tan pocos, 16, en contra.
La temporada en Cornellà fue deportivamente tan correcta que hasta el antepenúltimo partido en casa, la derrota ante el Eibar (0-1) que precipitó la salida de Quique, el equipo estaba en condiciones de igualar la mejor puntuación en los nueve años de estadio. Se trata de los 35 puntos del curso 2010-11, que comenzaron con un arrollador Espanyol a las órdenes de Mauricio Pochettino.
Finalmente, e inmerso en una temporada más que discreta, los 30 puntos igualaron con los de la 2014-15, con Sergio González como entrenador, y superaron además del ejercicio 2016-17, a otros dos: 2012-13 y 2013-14. Y todo ello, en parte, gracias a los siete puntos sumados ante Atlético, Real Madrid y Barcelona. Tova volver a empezar.
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