El Sevilla se complica la vida
Victoria por la mínima con golazo de Banega de falta y eliminatoria abierta ante el Zalgiris por la nula capacidad goleadora. Los de Machín ya piensan en el Barça.
EI Sevilla se adelantó al Zalgiris pero tendrá que viajar a Lituania con el mono de trabajo para cerrar una eliminatoria que no dejó sentenciada por su extrema ineficacia de cara a puerta. Más de una decena de ocasiones fallaron los de Machín con la sensación de que podrían haberse llevado toda la noche intentándolo y no hubieran marcado ni equivocándose.
El interior de la bota derecha de Banega, el mismo que dejó sólo a Messi con un pase espectacular el Mundial, sirvió para abrir la lata. Falta desde 25 metros centrada y golpeo sutil el 10 sevillista. Antes, el Sevilla las había tenido de todos los colores. Había reclamado un claro penalti por manos de Mbodj, Bartkus había sacado en la línea una chilena de Ben Yedder y otro disparo de Nolito desde el área pequeña.
Atrás el Sevilla sufrió más de lo deseado. Dos desapliques de Berrocal, que generaron un fallo en cadena de todo el sistema defensivo, facilitó dos claras ocasiones al Zalgiris, teniendo una de ellas que ser salvada por Vaclik en un mano a mano ante Ogana.
Gafados. No mejoró su puntería el Sevilla tras su paso por vestuarios. Al revés. Falló todavía más ocasiones y, como si de repetir el guión de la primera parte se tratara, Vaclik tuvo que sacar otra ocasión manifiesta tras error defensivo. Nervión despidió con pitos a un equipo que parece tener aún menos gol que el curso pasado.