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THE BEST

Conoce al jurado del The Best: Ronaldo, Lampard, Kaká...

13 leyendas del fútbol mundial eligen a los diez finalistas del galardón a mejor jugador. También seleccionarán a los diez mejores entrenadores del año.

Ronaldo y Kaká con la selección de Brasil.
ANTONIO SCORZAAFP

La FIFA publicará mañana martes la lista de diez candidatos para los premios The Best, tanto en categoría femenina como en masculina para jugadores y entrenadores. Centrándonos en los finalistas masculinos, un jurado formado por 13 leyendas del fútbol mundial ha escogido ya a los que optarán por levantar el galardón. Algunos de los deliberantes son viejos conocidos de LaLiga y prácticamente ninguno resulta desconocido para la afición:

Andy Roxburgh (Escocia)

Tras quince años de carrera deportiva como jugador, Roxburgh ya asumía que su futuro pasaba por los banquillos. En 1986, fue nombrado como seleccionador de Escocia y sus primeros años en el cargo fueron brillantes: clasificó al equipo para el Mundial de 1990 y para la Eurocopa de 1992. Desde 1994, ejerce como Director Técnico de UEFA. En la temporada 2012-13 probó una nueva aventura en el NY Red Bulls como director deportivo. Un año después, dimitió del cargo.

Cha Bum-kun (Corea)

Hasta la irrupción de Cha Bum-kun en Europa, el fútbol coreano había pasado absolutamente inadvertido en el viejo continente. En 1978, recibió la llamada del Darmstadt y su paso por la Bundesliga fue absolutamente brillante. En su primera campaña anotó veinte goles, lo que le sirvió para recibir una llamada del Eintracht de Frankfurt. En cuatro campañas, celebró 115 tantos. Cerró su aventura en el país germano en el Bayer Leverkusen: de 1983 a 1989, 102 goles llevaron su firma. Apodado Cha Boom, por sus potentes disparos.

Carlos Alberto Parreira (Brasil)

Una de las cinco estrellas que lleva Brasil en su pecho estuvo directamente protagonizada por Parreira. El técnico dirigió con maestría a la ‘Canarinha’ en el Mundial de 1994. Una magnífica generación (Bebeto, Mauro Silva, Romario, Dunga…) explotó al máximo sus recursos y supo sufrir. Ganó por la mínima sus duelos de octavos, cuartos y semifinales y se llevó el título tumbando a Italia en los penaltis. Él más que ninguno sabe de la labor de un entrenador y posiblemente habrá llevado la voz cantante en la selección de los diez finalistas de la categoría.

Lothar Matthäus (Alemania)

La leyenda alemana pasará a la historia como uno de los futbolistas más fieles a su selección nacional, jugando cinco Mundiales y cuatro Eurocopas. Ganó el Balón de Oro en 1990, después de levantar la Copa del Mundo meses antes. En 1980, fue protagonista en la Eurocopa bávara. Rozó la cima con los dedos en las finales mundialistas del 82 y el 84. Eso sí, esa vez no pudo ganarlas.

Emmanuel Amunike (Nigeria)

Las lesiones precipitaron la retirada de un futbolista que pudo ser mucho más de lo que fue. Entre 1997 y 2002, Amunike pasó un auténtico calvario que acabaría provocando su adiós al fútbol. Eso sí, podrá contarle a sus nietos que formó parte de la plantilla del FC Barcelona, con la que ganó dos Ligas, dos Copas y una Recopa. En una entrevista para FIFA, se mostró orgulloso de su paso por la Ciudad Condal: "Para mí representó una realización, conocer un club así fue una suerte inmensa. Estoy muy agradecido".

Alessandro Nesta (Italia)

Elegancia y Nesta siempre irán unidos de la mano. El central italiano pasó la mayoría de su carrera en el Calcio, donde se erigió como un auténtico mariscal en el centro de la zaga. Uno de los emblemas del Milán en el siglo XXI (jugó allí de 2002 a 2012), no pudo contener las lágrimas en su despedida: "El ritmo no me permite jugar siempre. He conocido a gente estupenda y he ganado mucho. Adiós Milán, han sido diez años maravillosos".

Sami Al Jaber (Arabia Saudí)

Posiblemente el más desconocido por la afición europea, Al Jaber es un jugador histórico en su país. De hecho, fue el primer árabe en recalar en Inglaterra, concretamente en el Wolverhampton. Fue en la temporada 2000-01, durante cinco meses tras una cesión. Una vez finalizó ese período temporal, el club inglés mostró su deseo de adquirir en propiedad al futbolista, pero su club de origen, el Al-Hilal, se negó en rotundo. Allí, una auténtica institución: 448 partidos y 177 goles.

Fabio Capello (Italia)

Si bien Capello puede presumir de lograr cuatro Serie A y dos Copas Italianas como jugador, su trayectoria como entrenador es aún más inmaculada. Pasó por el Milán (cuatro ligas, tres copas y una Champions), el Roma (un Scudetto y otra copa) y la Juventus (dos Calcios). También firma una página en la historia del Real Madrid. En la capital consiguió dos Ligas, una de ellas la recordada por épicas remontadas…

Kaká (Brasil)

El Milán fichó a un joven de 21 años en 2003, sin saber que se convertiría en un mito de la institución. Tras varias campañas brillantes, su auge deportivo llegó en 2007, con la obtención del Balón de Oro después de comandar meses antes a su club en una nueva Champions League. Dos años más tarde, firmaría por el Real Madrid como un galáctico con todas las letras, pero sus problemas de lesiones le impidieron triunfar en la capital. En 2013 volvió a Italia y, en 2014, pondría rumbo al Orlando City, su último club antes de su retirada en 2017.

Ronaldo (Brasil)

Considerado por muchos como el mejor delantero de la historia, Ronaldo ha dejado huella en cada club que ha representado, con unas estadísticas goleadoras demoledoras y una técnica innegable. Salvo en el Milán (9 goles en 20 partidos), en todos sus equipos ha sumado más de 0.5 tantos por encuentro. En Barcelona y Eindhoven dejó unas cifras aterradoras: 47 goles en 49 choques y 51 en 54, respectivamente.

Didier Drogba (Costa de Marfil)

Contar con Drogba es asegurarse entrega, garra, intensidad y, sobre todo, gol. El marfileño ha sido una de las señas de identidad del Chelsea en el siglo XXI. Nueve temporadas en Stamford Bridge, para un total de 164 goles en 381 encuentros. En la actualidad, el delantero apura sus últimos momentos como futbolista profesional.

Frank Lampard (Inglaterra)

Comenzó su carrera deportiva en el Swansea y, posteriormente, vistió las camisetas del West Ham, del Manchester City y del Orlando City. Sin embargo, la primera imagen que se le viene a cualquier amante del fútbol a la cabeza al pensar en el mediocentro inglés es vestido con la camiseta del Chelsea y portando con orgullo el brazalete de capitán. Aunque su salida del club londinense fue algo polémica, es innegable que deja un legado difícil de igualar: 648 partidos, con 210 goles.

Wynton Rufer (Nueva Zelanda)

Un mito neozelandés que enamoró en la Bundesliga. Sus primeros pasos en el mundo del fútbol fueron en Suiza, hasta la llamada del Werder Bremen en 1989. En su trayectoria en el país teutón, sumó una liga, dos Copas Alemanas y una Recopa. Por si quedaba alguna duda: fue nombrado como mejor jugador de Oceanía en el siglo XX.