Cristiano rechazó en enero un aumento del club por objetivos
Hace un mes el club y el jugador se emplazaron para retomar las negociaciones al finalizar la Champions. Su entorno cree que se trata de un simple calentón. Leonardo se resignó: Ha sido imposible fichar a Zlatan
Las declaraciones de Cristiano nada más terminar la final de Kiev han cogido por sorpresa a su propio entorno, que opina que es un simple calentón. Hace meses el delantero portugués había llegado a afirmar a varios de sus compañeros en el seno del vestuario que la próxima temporada no estaría en el Madrid, pero el pasado mes de abril el Madrid le comunicó su intención de mejorarle el contrato y cumplir la promesa adquirida por Florentino Pérez con él tras la final de Cardiff. Tras esa primera toma de contacto entre José Ángel Sánchez, director general del Madrid, y Jorge Mendes, representante de Cristiano, parecía que al crack portugués se le había ido de la cabeza esa idea de irse del club blanco.
En esta primera toma de contacto entre José Ángel Sánchez y Jorge Mendes no se había hablado de cantidades, pero la intención era que Cristiano estuviera tranquilo de cara al tramo final de la temporada sabiendo que se le iba a mejorar la ficha y situarla cerca de la de Neymar. El entorno del jugador, incluso, reconocía que el astro portugués había valorado muy positivamente ese movimiento del club. Tras esa primera toma de contacto de abril, la intención de las dos partes era retomar los contactos después de que el Madrid acabara su participación en la Champions. Sin embargo, el movimiento realizado ayer por el crack portugués no se encontraba en la hoja de ruta de la negociación.
El enfado de Cristiano surge de la promesa que le hizo Florentino al asegurarle una subida de sueldo tras la final de Kiev y meses después echarse atrás. En diciembre, durante el Mundial de Clubes en Abu Dhabi, José Ángel Sánchez y Cristiano mantuvieron una reunión, en la que el directivo trató de aplacar el malestar del crack proponiéndole una mejora por objetivos. Consistía en un incremento de nueve millones, pero condicionado a la consecución de títulos (la Champions, la Liga...) y premios individuales (Balón de Oro, The Best...). La oferta fue rechazada por Cristiano al considerarla una falta de respeto a su trayectoria en el club. Para colmo, la noche en la que el portugués ganó su quinto Balón de Oro, Florentino se deshizo en elogios hacia Neymar. Ese flirteo del presidente con el jugador del PSG no le pareció apropiado. Así que la bomba lanzada ayer por Cristiano no ha hecho más de darle luz a una situación enquistada desde hace meses.