El fútbol femenino, con récord de licencias y espectadores

La Liga Iberdrola puso punto y final a su segunda edición desde la apuesta de LaLiga y la empresa eléctrica por el fútbol femenino volviendo a batir récords. Hay más licencias, más espectadores delante de la televisión, más público en los estadios y más implicación por parte de los clubes masculinos. Un crecimiento que parece que no tiene límites y que está convirtiendo a la competición española en una de las más potentes de Europa.

La primera gran noticia es el aumento de licencias. Las jugadoras son la base del deporte y la apuesta de los clubes por la cantera hace que haya más niñas jugando. En sólo ocho años casi se han duplicado las licencias pasando de las 24.000 de 2010 a las más de 42.000 de esta temporada. De hecho, el gran empuje llegó con el desembarco de Iberdrola cuando se pasó de 31.000 a 40.000. El fútbol femenino está de moda y cada vez más niñas sueñan con llegar a ser como sus ídolos, que ya no son Messi o Cristiano Ronaldo sino Sonia, Amanda o Martens.

La televisión. La gran apuesta televisiva por la Liga Iberdrola es otro de los factores que ha impulsado la competición. De hecho, el número de televidentes está creciendo de forma llamativa. La pasada campaña se televisaron en abierto 63 encuentros (más los que se retransmitieron por beIN de pago). De ellos, diez superaron los 100.000 espectadores, y no tenían ni a Atlético ni a Barcelona, los equipos con más televidentes. El partido más visto el curso anterior fue entre los grandes candidatos al título con 191.400 espectadores.

Esta temporada se han superado todas las previsiones. De 65 partidos retransmitidos en abierto, 32 superan los 100.000 espectadores. De hecho, no se han parado de batir récords alcanzando los 200.000 en cuatro partidos. El que más espectadores tuvo, de nuevo, fue el Atlético-Barcelona con 287.700. Fueron 285.100 los que vieron el estreno del Metropolitano y 271.400 el Barcelona-Atlético.

Y los estadios. Grandes campos se han estrenado este curso en el fútbol femenino como el Villamarín, el Sardinero (con el Racing en Segunda), Anoeta o el Metropolitano, que congregó a 22.000 espectadores. Ya el pasado año Mestalla, el Calderón, el Heliodoro o el Ciutat de Valencia (que repitió esta campaña) abrieron sus puertas al femenino. El pionero fue el Athletic, que en 2003 metió en San Mamés 35.000 personas, aún el récord. Uno de los pocos que falta por batir, porque aún no se sabe dónde está el techo del fútbol femenino...