Cerceda y Osasuna B también certifican su descenso a Tercera
Siguen la estela del Caudal y el Deportivo Aragón, que perdieron sus opciones matemáticas de permanencia la semana pasada.
Se veía venir desde hace algunas jornadas, pero todavía quedaba la esperanza. Una vaga esperanza que no ha sido suficiente para obrar el milagro. Tras ir toda la temporada al ralentí y poblando la zona de descenso de la tabla, el Cerceda y el Osasuna B certificaron este fin de semana su descenso a Tercera División. Con ellos ya son cuatro los equipos que matemáticamente ya han perdido la categoría.
El Cerceda, colista del Grupo I, desciende a Tercera tras haber logrado este curso solamente 24 puntos. Su balance, demasiado pobre como para mantenerse en una categoría tan exigente como la Segunda B: cinco victorias, nueve empates y 20 derrotas. Es el tercer equipo de toda Segunda B que más derrotas ha encajado, por detrás del Caudal (22) y Osasuna B (21), también descendidos, y empatado en este sentido con Lealtad y Deportivo Aragón.
Sólo el Lealtad se salva del descenso matemático por ahora con esos números, aunque puede ser uno de los siguientes equipos que la certifique, ya que sólo tiene un punto más que el Osasuna B. El filial rojillo, con 23 puntos en su haber, certificó matemáticamente su vuelta a Tercera División tras caer en El Sardinero ante el Racing por 2-0, goles de Borja Lázaro y Aquino.
El único grupo de Segunda B que todavía no tiene ningún equipo descendido es el IV, donde la lucha por la permanencia está realmente disputada. El equipo con más papeletas de caer a Tercera es el Lorca Deportiva, colista, que sin embargo, se encuentra a siete puntos de la salvación.