La visita del Getafe es el principio del fin para Eusebio y su etapa en la Real (sigue el partido en directo en As.com). Es el primero de los diez partidos que le quedan para despedirse de la mejor forma del equipo txuri-urdin, ese al que llevó a tocar el cielo europeo, pero con el que ha naufragado esta temporada. Su salida el próximo verano, a pesar de tener otro año más de contrato, está decidida y es irremediable. Le guste o no, el técnico de La Seca será el protagonista indiscutible, porque todas las miradas se centrarán en su figura. En la semana en la que se le ha puesto fecha de caducidad en San Sebastián, ¿cómo actuará? Sobre todo, siendo consciente de que la Real se ha quedado sin objetivos.
Para evitar especulaciones malintencionadas, Eusebio debe volver a hacer ganar a su Real. Enfrente parece que tendrá un buen invitado a esta fiesta con pinta de funeral, un Getafe que es nefasto a domicilio, tanto que lleva desde septiembre del año pasado sin ganar fuera del Coliseum. Pero los de Bordalás, con dos puntos más, quieren agarrarse al clavo ardiendo de soñar con Europa mientras siguen poniendo tierra de por medio con el descenso. Ese descenso al que la Real no quiere mirar, pero más le vale hacer los deberes a tiempo no vaya a llevarse un disgusto a última hora. Lo que le faltaba al pobre Eusebio, el mejor ejemplo de cómo se pasa de héroe a villano en el mundo del fútbol. Los resultados nunca perdonan.
Para ello, el técnico realista tendrá la baja de última hora de Zubeldia, un contratiempo importante porque su entrada en la medular había dotado de equilibrio al equipo y de mayor libertad a Illarramendi para sumarse con éxito al ataque. Con Rulli y Xabi Prieto también lesionados, Eusebio saldrá con lo puesto en la medular, esperando que la mezcla Canales-Zurutuza de resultado. Aunque volverá a basar todas sus opciones atacantes a Willian José, su trabajo y sus goles. Y mientras, a la espera de que se recupere Remy, Borladás se apoyará en los Jorge Molina, Ángel Rodriguez... que ya le hicieron el lío a la Real en Madrid remontando en la segunda parte. La pena es que Markel Bergara no puede jugar contra el Getafe en Anoeta, por culpa de una lesión. Era su oportunidad para reivindicarse delante de Eusebio, igual que Granero la semana pasada. Aunque para reivindicaciones la del vallisoletano. Necesita ganar para callar bocas. Porque sino Anoeta será un clamor. Es el principio del fin.