Cumbre contra los Ultras
Los representantes de la Oficina Nacional de Deportes trasladaron a la UEFA propuestas para implementar a corto y largo plazo.
EI Gobierno armó una reunión en el Consejo Superior de Deportes a la que invitó a la UEFA para estudiar medidas contra la violencia ultra tras los últimos sucesos en Bilbao con los enfrentamientos entre los radicales del Spartak y del Athletic.
Durante la sesión de trabajo, los representantes de la Oficina Nacional de Deportes de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana de la Policía Nacional trasladaron a la UEFA propuestas concretas para implementar a corto y largo plazo. Según el comunicado emitido por el Ministerio de Educación, Cultura y Deportes, entre estas medidas están “generalizar la entrega de entradas en destino y las entradas nominativas, la mejora de la aplicación del régimen sancionador a los clubes o el incremento de la cooperación en los dispositivos policiales entre los países de los equipos participantes”.
En la reunión, celebrada en el Consejo Superior de Deportes, en Madrid, participaron el secretario de Estado de Seguridad, José Antonio Nieto, el secretario de Estado para el Deporte, José Ramón Lete, el presidente de LaLiga, Javier Tebas y el presidente de la comisión antiviolencia de la RFEF, Francisco Díez. Por parte de la UEFA acudió Kenny Scott, jefe de Seguridad y Protección de la organización. También acudieron representantes de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad de España, en concreto el comisario general de seguridad ciudadana, Juan Carlos Castro, y el representante de la Oficina Nacional de Deportes de la Comisaría General de Seguridad Ciudadana, Juan Carlos Gil.
La UEFA estudió el pasado lunes en su Congreso en Brastislava los sucesos acaecidos en San Mamés, y está pendiente de tener completo el informe policial para tomar medidas sancionadoras. Esa responsabilidad recaerá en el español Emilio García Silvero.
El secretario de Estado de Seguridad de España, José Antonio Nieto, dijo que las entradas nominales y entregadas ya en destino a los seguidores “facilitarán a la Policía el trabajo de identificación en caso necesario. Si los aficionados violentos persisten en sus conductas, eso permitirá sancionar a sus equipos, impedir que viajen a los partidos europeos y, en casos graves, incluso expulsar a sus clubes de la competición”.