Reencuentro con el gol
Borja Iglesias puso fin el pasado domingo frente al Lugo a una sequía de casi dos meses y Buff, con un golazo de falta, volvió a ver puerta una vuelta después.
Una de las muchas buenas noticias que dejó la victoria del Real Zaragoza frente al Lugo fue el reencuentro con el gol de Borja Iglesias y Buff. El delantero se encontró un balón dentro del área para abrir el marcador con una gran definición y el futbolista suizo, que ingresó en el terreno de juego en la segunda parte, sentenció el encuentro con una magistral lanzamiento de falta por encima de la barrera.
Borja Iglesias, que ya suma diez goles en 26 jornadas en su estreno en Segunda División, llevaba casi dos meses sin ver puerta. Su último gol lo marcó el pasado 19 de diciembre en Valladolid, donde hizo un doblete que de nada le sirvió al Zaragoza, que perdió por 3-2. Por tanto, se trata del primer gol del delantero gallego en 2018 y en la segunda vuelta.
Algo mayor era la sequía de Borja en La Romareda, donde acumulaba cuatro meses sin ver puerta. Su último gol lo logró contra el Osasuna el pasado 15 de octubre, un tanto que sirvió para sumar un punto contra el conjunto navarro. Además, el gol del pasado domingo contra el Lugo es el primero de jugada que marca Borja en La Romareda, ya que los cuatro anteriores, incluido el de Copa, habían sido desde el punto de penalti.
Precisamente, Borja tuvo en sus botas la posibilidad de poner la guinda a su gran actuación frente al Lugo desde los once metros, pero Juan Carlos adivinó sus intenciones y detuvo su disparo. Se trata del tercer penalti que falla el delantero gallego de forma consecutiva, cuando sus cinco primeros lanzamientos habían ido al fondo de la red.
El otro futbolista que se reencontró con el gol frente al Lugo fue Oliver Buff. "En el día a día está en el mejor momento de la temporada. En cualquier momento va a aparecer y creo que vamos a ver al mejor Buff, al que aún no hemos visto en su pleno potencial", había avisado en la previa del partido Natxo González. Y el futbolista suizo le dio la razón.
Buff, que apenas ha contado con minutos en los últimos meses, en los que también ha tenido alguna molestia en la rodilla, sustituyó a Febas en el minuto 65, mejoró al Zaragoza y sentenció el encuentro con un golazo de falta. Un premio a su gran actuación y que pudo ser mayor si un par de minutos después su vaselina hubiera entrado en lugar de estrellarse en el larguero.