1x1 del Atlético: los de Simeone conceden y lo pagan
Cuando tenía controlado el partido el Atlético se despistó y lo reflejó el resultado. Costa no fue suficiente y Moyá no tuvo su mejor día.
Moyá. Desacertado en las acciones clave y sin milagros... Respondió bien a Correa por dos veces en el 25', blocando su cabezazo, y aguantando y achicando muy bien en el 27' en el mano a mano. En el 36' desbarataba otra contra peligrosa. Bien en las salidas hasta el centro de Navas. Se envenenó en la cabeza de Lucas y, después terminó metiéndose él la pelota, acusando desorientación. Después quizá dudó un segundo a la hora de salir a los pies de Correa y ya no pudo hacer nada en el mano a mano.
Juanfran. Entró con mucho ímpetu en el juego. Más vertical con Koke delante que con Vitolo. Se afanó en no verse sorprendido y en no evidenciar dudas. Estuvo correcto, pero sin alardes. Se asoció bien con Correa y, tras el gol, se midió más.
Savic. Despistado. Intentó cuidarse de la velocidad de los atacantes y lo iba consiguiendo hasta la recta final. En el 74' perdió un balón que le pudo costar carísimo al Atlético. El montenegrino tiene su talón de Aquiles con el balón en los pies y el Sevilla le buscó las vueltas. Después tampoco anduvo nada fino para medir la prolongación de Bem Yedder.
Godín. Como sucedió en Eibar, tampoco fue signo de serenidad total en la zaga. Inició bien sobre Muriel, sin darle opciones. Después sufrió con las contras sevillistas del primer tiempo, aunque eso queda más en el debe del centro del campo que en esa fase regaló varios balones. Cuando parecía que el equipo controlaba el partido y que ya no iba a dar opciones al rival, le volvió a tocar correr hacia atrás y ni él ni Savic resolvieron. Le faltó contundencia sobre Ben Yedder para que no prolongara tan fácil en el segundo gol.
Lucas. Cada vez maniobra con más soltura con balón cuando le toca actuar de lateral, perfilándose bien y tocando con precisión en espacios reducidos. En el 19' ganó por arriba la pelota que después Costa casi convierte en gol con su cabezazo. Muy firme en defensa, sin dudas y haciéndolo casi todo bien.
Koke. A la media hora Simeone le pasó al centro para jugar junto a Gabi. Había comenzado en la derecha y pasó por la izquierda. Dejó un par de pérdidas peligrosas, la segunda, la que terminó con el mano a mano de Correa. Se fajó en el partido de desgaste que plantearon ambos, controlando mejor la pelota en la segunda parte, pero sin darle nunca un ritmo al equipo como para poder desarbolar la defensa andaluza. En la línea de Ipurua. Poco.
Gabi. Salió con la misión de estar pendiente de Vázquez y su juego entre líneas. En la primera parte no supo controlar dos contras mortales del Sevilla que no terminaron en gol por poco. No colaboró precisamente a que el juego del Atlético fuera más rápido. Sorprendió que cuando el partido parecía ya empezar a estar controlado por los centrocampistas del Atlético, llegaron los goles visitantes. Regular.
Saúl. También cambió su posición en el 30'. El Cholo le acostó a la derecha para intentar dañar a Escudero con su envergadura, como hizo el día de la Real. Se acercó entonces a Griezmann y a Costa, y así organizó la contra del 39' en la que Ricó despejó con apuros el remate de Costa. ,En el segundo tiempo lideró el empuje colchonero que fue arrinconando al Sevilla, más por poderío que por juego. Mejoró algo las prestaciones del último partido, pero todavía alejado de su mejor versión.
Vitolo. Sarabia a los tres minutos le mostró que sus excompañeros no le iban a hacer concesiones. Volvió a tratar de infiltrarse por dentro para mezclarse con Costa y Griezmann. El Cholo le dio una parte como titular. Aún le falta ritmo.
Griezmann. Bastante menos fino que en la primera parte de Ipurua. Empezó bien, orientando bien los ataques para que Costa los terminara. Le faltó aprovechar la fuerza de percusión del nueve para manejarse mejor en el espacio que le concedía el Sevilla por detrás, más pendientes del hispanobrasileño. Pero le faltaba frescura y el Cholo lo entendió bien. Le sustituyó y dio entrada a Carrasco.
Costa. Cada vez que aparecía era para incordiar y generar peligro. Sin contar el gol anulado, ganó con muchísimo peligro otro dos balones aéreos en el área sevilista durante el primer acto. Aparecía bien para aguantar y descargar, tranquilizando el, a veces atropellado, atlético. Siguió insistiendo y al final el gol llegó casi de la forma menos inesperada. Recogió un balón rebotado y armó un zurdazo colosal. El Atlético se agarró a un hambre y a su poderío, pero no fue suficiente.
Correa. Su entrada aceleró las transiciones el Atlético. Vertical y más profundo que Vitolo, casi marca de forma involuntaria en el 66' cuando su centro, peinado por un defensa, golpeó en el poste. Con él en el campo el equipo del Cholo fue otro, atrevido y rápido. Puso en aprietos a Escudero y fue la llave del Atlético en la segunda parte.
Carrasco. Tuvo buenos momentos entrando por ambos flancos. El gol llegó tras un remate suyo y a renglón seguido casi asiste a Costa en una buena incursión. Parecía que sus galopadas acercaban el segundo gol, pero en realidad el partido se fue descosiendo y no con el resultado que el Atlético quería.
Torres. Apenas entró en juego en los pocos minutos que estuvo sobre el césped.