Fallece Juanjo Díaz, técnico y "hooligan" de un Espanyol añejo
Logró el ascenso con el Espanyol de Segunda a Primera en la campaña 1989-90. Murió el lunes a los 68 años. Azkargorta y Clemente recuerdan su figura.
Una larga enfermedad se llevó esta mañana de miércoles a Juanjo Díaz (Barcelona, 1949), ligado al Espanyol de una forma activa y en diferentes funciones desde 1980. Primero se encargó de ser la mano derecha de Xabier Azkzargorta en el Juvenil y en el primer equipo del Espanyol. Luego, repitió funciones con Javier Clemente y llegó a ser entrenador del primer equipo en la campaña 1989-90 y la 1992-93. En la primera de ellas fue el artífice del ascenso a Primera después de una tanda de penaltis 'taquicárdica' en La Rosaleda (Málaga). De 2003 a 2013 fue director de la Ciudad Deportiva de Sant Adrià.
La mejor definición de Juanjo la hizo Clemente a este diario. "A día de hoy podríamos definirlo como un hooligan del Espanyol", comentó. Un recuerdo perenne para el técnico vasco que logró alcanzar la final de la UEFA en 1988, uno de los momentos míticos de ese Espanyol añejo, con Díaz en el banquillo de aquellos míticos partidos. "Era una persona muy querida y un gran amigo. Todos los apreciaban", recuerda el técnico de Barakaldo, consternado por la noticia. "Es una pérdida grande. Los tíos buenos siempre se van primero".
Al margen del Espanyol, Juanjo hizo posteriormente carrera como entrenador en el fútbol catalán, convirtiéndose en un nómoda de los banquillos, dejando huella como persona en todos los rincones. Mollerusa, Palamós, Valladolid, Huesca, Andorra, Águilas, Cartagena o Badajoz como última experiencia. "Era entrañable, pero tenía su carácter", deslizó Clemente, a lo que Xabier Azkargorta añade que "daba la sensación de uraño, porque era una persona que no hacía concesiones. Pero era muy justo, se entregaba siempre a todo el mundo y no tenía dos caras. Era serio, pero muy profesional".
El propio Azkargorta recuerda el gran mérito de Díaz, sin contar su entrega de siempre al Espanyol, que fue el asenso de Segunda a Primera en la campaña 89-90. "Coincidimos en el sorteo de promoción. Yo entrenaba al Tenerife y no quería al Deportivo. Al final nos tocó, pero nos mantuvimos. Y el Espanyol eliminó al Málaga en los penaltis", añora. "Recuerdo que yo era el segundo entrenador de Milorad Pavic pero le dije al club que quería seguir vinculado al Juvenil. Hacía de primero y Juanjo me ayudaba. Cuando Pavic fue destituido yo asumí el cargo con Juanjo como mano derecha", comenta.
Una época divertida y triunfante del Espanyol. Azkargorta recuerda aquella vez que los jugadores del Espanyol se disfrazaron de los personajes de la obra teatral de la Venganza de Don Mendo y "Luaridsen interpretaba al Abad, pero causaba baja cuando tenía que ir con la selección. Juanjo Díaz se encargaba de cubrirle". No olvidará nunca el técnico "aquellos momentos divertidos" y "los primeros entrenamientos con Juanjo en el campo de la Seat".
Sus jugadores tampoco lo olvidan, como Eloy Pérez, quien compartió también con él la dirección de la Ciudad Deportiva hasta su jubilación. Y recordó recientemente alguna que otra anécdota para este diario. "Más vale un 0-0 que una patada en la entrepierna”, nos explicaba como una de las frases más míticas del técnico en su visita al campo del Eibar. Una persona que no dejaba indiferente. La capilla ardiente se instalará este jueves a partir de las 11:00 en el Tanatorio de Terrassa y el funeral se oficiará el viernes día 8 a las 11:45. Descanse un paz.
