Trezeguet: “Seguro que Cristiano se divierte con Benzema...”
11 temporadas en la Juve (320 partidos, 171 goles); antes en Platense y Mónaco; y después en Hércules, Baniyas, River, Newell’s y Pune.
¿Era complicado ser ‘9’ en el Calcio que usted jugó?
Sin duda, pero el jugador de élite quería estar allí. Yo viví la época de Crespo, Shevchenko, Batistuta, Inzaghi… La dificultad no sólo estaba en la táctica cerrada, también en el nivel de los Nesta, Maldini, Thuram, Cannavaro… Imagínese.
¿Ha evolucionado el puesto del ‘9’?
Más en general, se empezó a perder el puesto del ‘10’, lo que ustedes llaman mediapunta y en Italia trequartista. Lo que era Kaká, para entendernos. Esa figura se ve menos, como también es difícil ver a un delantero centro puro, a un Higuaín, Cavani, Luis Suárez o Lewandowski…
¿Por qué cada vez es más difícil verlos?
Puede ser porque se le piden al delantero otros requisitos. También se ha puesto de moda el 4-3-3 y ese sistema pide menos esa figura. Los nombres de los que le hablaba se muestran como jugadores más dinámicos y menos como referencia estática. Tienen más movilidad, participan más, aunque sean luego los que tienen unos números importantísimos de cara al gol.
¿Cuándo empezó el cambio?
Para mí el Barcelona tuvo mucho que ver en esta tendencia. La movilidad, el cambiar posiciones…
Pero el gol sigue siendo la salsa del fútbol; los que lo tienen son los más caros.
Nunca dejará de ser así. Lewandowski, Higuaín o Suárez son los que tienen mejores promedios... Aun siendo dinámicos.
¿Y Benzema?
Escucho que hay ruido en torno a él, sí…
La pregunta del millón es si es nueve, diez o nueve y medio. ¿Para usted, qué es?
Es un jugador que mezcla todas estas posibilidades, la de ser un nueve puro o un mediapunta, porque tiene una técnica diferente al resto. Tiene movilidad y hace goles… Y se complementa muy bien con Cristiano. Seguro que Cristiano estará muy contento de tener a su lado a un jugador como Benzema, con el que puede divertirse en el juego.
¿A usted le gusta Benzema?
Se puede permitir jugar de varias maneras, y esto es muy interesante. Y lo está demostrando en el mejor equipo del mundo, porque hay que reconocer que el Madrid, por lo que está haciendo en los últimos años, lo es. Es algo extraordinario y él está haciendo parte de esta historia. Esto es fuerte. También existe un hándicap, el imponerse como jugador extranjero.
¿Entiende que a Benzema se le pida tener más gol si juega de nueve?
Seguro. Pero a lo largo del tiempo ha demostrado ser un jugador importante para el Madrid. Trasladado a mi periodo es una mezcla de lo que era un Raúl y en un periodo anterior un Butragueño. Te da más variedad de juego que estadística.
¿Fue demasiado duro Lineker cuando dijo que Benzema estaba sobrevalorado?
Yo lo que veo importante es que siga demostrando que se merece la camiseta del Madrid. Karim tiene las características de la modernidad del fútbol actual. Han pasado muchas cosas desde que jugaba Lineker. De todas formas, entendería el debate sobre si estos cambios son buenos, positivos, o no tanto… Pero cada uno marca su historia. ¿Quién podría comparar la generación de Butragueño y Hugo Sánchez con la de Benzema?
¿Usted pudo fichar alguna vez por el Madrid?
En la segunda época de Capello, en 2006, se puso en contacto conmigo. La Juve acababa de sufrir el descenso administrativo. Hubo quienes nos quisimos quedar, como Del Piero, Buffon o yo. Había que dar las gracias a ciertos valores que nos habían transmitido. Luego, lo bonito del fútbol es que terminó fichando Van Nistelrooy y demostró lo gran jugador que es. Éste era otro nueve de los de antes, increíble.
¿Quién le fascinó más a usted sobre un campo?
Me tocó jugar en el equipo de Zidane, Del Piero, Ibrahimovic… Jugué con Henry… Jugué contra Ronaldo, Ronaldinho… Imagínese. La gente sigue admirándolos profundamente.
¿Estaba antes más repartida la cosa, no?
(Risas). Sí, sí… Ahora hay dos que se reparten el pastel. Cristiano y Messi han marcado una tendencia total. Es interesante para los jóvenes, que vean cómo se alimenten el uno del otro y aprendan ese afán de superación admirable.
Hábleme de Cristiano: sin jugar de nueve es el que tiene más gol.
Lo siente, lo respira, trabaja para ser el mejor. Cristiano es el gran ejemplo de profesionalidad, de otro modo no se entendería que haya podido estar tanto tiempo en la cima.
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