Después de derrotar al Bayern Múnich en Champion’s (3-0), el Paris Saint-Germain completó su gran semana con un contundente triunfo en la Ligue 1 contra el Girondins (6-2). Frente a un rival bien clasificado (tercero antes del inicio del encuentro), Unai Emery apostó por un once con varios cambios en defensa, dando la titularidad a Berchiche, Kimpembe y Meunier, y Draxler en el centro del campo. Y la apuesta salió redonda al técnico español, ya que su equipo firmó una primera parte mágica, endosando cinco goles a su rival.
El festival empezó rápido, en el minuto 5, cuando Neymar clavo un tiro libre perfecto desde 30 metros en la portería de Costil (1-0, min.5). Poco después, a la conclusión de una combinación perfecta entre Mbappé y Neymar, Cavani recibió el balón del brasileño y marcó con un tiro raso con el exterior del pie, que dio aire a los suyos (2-0, min.12).
La defensa del Girondins - que había encajado solo 7 tantos desde el inicio del campeonato - se vio superada de nuevo nueve minutos más tarde. A la recepción de un centro de Berchiche, Mbappé falló su volea pero Meunier, justo detrás, mandó un tiro potente que dejó a Costil sin reacción (3-0, min.21).
En el minuto 39, después de acortar distancias en el marcador por Sankharé, llegó lo que tanto hizo hablar en los días precedentes: un penalti para los parisinos. Si el ultimo lo lanzó Cavani, después del conato de discusión y 'mal rollo' con Neymar, esta vez fue el brasileño el que lo intentó y lo transformo en gol (4-1, min.40). Prueba que el caso parece resuelto, Cavani fue el primero en felicitar a su compañero y no mostró ningún tipo de decepción cuando el 10 parisino quiso tirarlo. Habrá que ver en un siguiente penalti si el exjugador del Barça será ahora el encargado de lanzar siempre la pena máxima o si el uruguayo también tendrá su oportunidad de lanzarlos.
En la recta final de la primera parte, Draxler combinó con Mbappé, que le devolvió la pelota con un buen centro y el alemán marcó gracias a una preciosa volea (5-1, min.45). Con los deberes hechos, el PSG no forzó mucho en la segunda parte, pero engordó su goleada gracias a Mbappé. Esta vez fue Draxler quien asistió al internacional galo, que marcó con un tiro cruzado imparable (6-1, min.58). A pocos minutos del final, Malcom - de penalti - maquilló un poco el resultado transformando también un penalti para los Girondins (6-2, min.90). Gracias a esta victoria, combinada con el empate del Mónaco en Montpellier, los parisinos cuentan ahora tres puntos de ventaja sobre su máximo rival hacia el titulo.
