Kovacic, el antídoto para Messi
El croata ha jugado cuatro de los últimos cinco Clásicos de inicio y el argentino únicamente brilló en el que no fue titular (el de LaLiga en el Bernabéu).
Kovacic se ha convertido en un 'stopper' de primer nivel. El croata llegó al Madrid como un jugador de corte ofensivo, capaz de arrancar con el balón en los pies en el medio del campo y romper las líneas del rival con su increíble conducción de pelota, pero con mucha inexperiencia en el trabajo defensivo. Su empeño por triunfar en el Madrid y hacerse un hueco en el once han llevado a Kovacic a ampliar sus registros y se ha convertido en dos años en un centrocampista total, capaz de hacer que el Madrid no note la ausencia de un pivote como Casemiro o de un "box to box" como Kroos y Modric.
La temporada pasada Zidane contaba con 24 jugadores, dos por puesto a excepción del pivote defensivo. Casemiro era el único del centro del campo que parecía poder cumplir con las tareas de 'stopper', por lo que una posible baja del brasileño se temía como catastrófica. El brasileño se rompió en octubre y Kovacic ocupó su lugar y el Madrid no se resintió. El '23' blanco jugó a un excelente nivel, formando parte del once en partidos de gran importancia como el 0-3 en el Calderón y el 1-1 en el Camp Nou de la primera vuelta de LaLiga.
Desde aquel Clásico, Kovacic ha jugado en los últimos cinco enfrentamientos entre Madrid y Barça y ha cumplido con nota, es más, ha demostrado ser el mejor antídoto para frenar a Leo Messi. Desde el 3 de diciembre de 2016, Madrid y Barça se han visto las caras cinco veces (dos en LaLiga, dos en la Supercopa de España y una en el amistoso de Miami) y en cuatro de ellas Kovacic fue titular. En los dos encuentros de la Supercopa de España y en el primer Clásico de la temporada pasada, Zidane le encomendó a Kovacic un marcaje al hombre a Messi. Y el croata cumplió. El balance de esos partidos es de dos victorias y un empate para el Madrid. Curiosamente, el único partido entre blancos y azulgrana en el que el centrocampista croata no salió de inicio fue el del 2-3 en el Bernabéu en el que Messi se exhibió con dos goles.
En el amistoso de Miami, el equipo de Zidane también perdió el encuentro por 2-3 pero en aquella ocasión Kovacic se movió por otra zona del campo, más cerca del ataque, y fue sin duda el mejor jugador del Madrid, llegando a marcar un gol y reactivando a un Madrid que empezó dormido y perdiendo por 0-2 en los primeros minutos de partido.