El Cruz Azul de Jémez no pasa del empate ante el Oaxaca
A pesar de jugar con un futbolista más durante 22', los hombres del técnico español no pasaron del 0-0 en la cuarta jornada de la Copa MX.
El español Paco Jémez, entrenador del Cruz Azul, no encuentra el triunfo en el fútbol mexicano, al que llegó para el actual Torneo Clausura 2017 después de que en nueve partidos, entre Liga y Copa, su nuevo equipo hubiese registrado una victoria, cinco empates y tres derrotas.
Jémez se incorporó al equipo mexicano como la principal solución para devolverle protagonismo en la liga local, en la que no ha entrado a la liguilla, fase en la que los ocho mejores disputan el título, desde el Apertura 2014 y en la que no ha sido campeón desde el Torneo Invierno 1997.
Tras debutar con un triunfo por un 1-0 ante el Necaxa, el 7 de enero en la primera jornada de la Liga, el Cruz Azul y Jémez ilusionaron a su afición, que aquel día llenó el estadio, pero esa confianza se diluyó prácticamente en 40 días.
En ese lapso, Jémez dirigió al equipo en cinco jornadas de la liga, con un saldo de tres empates (Monterrey, Querétaro y Santos) y dos derrotas (Pumas y Tijuana), y tres de la Copa, con dos igualadas (Alebrijes de Oaxaca, de la Liga de Ascenso) y un tropiezo, (Querétaro).
"Hay ocasiones que no encuentras explicaciones lógicas a cosas que pasan en el fútbol (...) el fútbol es ilógico en algunos momentos", señaló Jémez el domingo, tras el empate 2-2 ante el Santos Laguna en la liga.
Este miércoles, Jémez extendió a ocho partidos su racha sin triunfos, tras empatar sin goles en su visita al Alebrijes, en el cierre de la cuarta jornada de la Copa MX.
El empate dejó a su equipo en el segundo lugar del Grupo 2 con dos puntos, los mismos que el Oaxaca, tercero, mientras que el Gallos de Querétaro es el líder del sector con seis unidades y será el rival del Cruz Azul en la quinta jornada de la Copa.
Ahora el equipo del técnico español está obligado a ganar y esperar resultados de terceros para avanzar como uno de los mejores segundos a la fase de los 16 mejores, objetivo que se antoja complicado y que, si no alcanza, representará su primer revés al frente del Cruz Azul.
Ante lo complejo de la situación, Jémez ha dicho que intenta no caer en la desesperación: "Si me desespero yo tenemos que empacar todo e irnos para casa. (La situación) necesita de tranquilidad y el primero que debe mantenerla es el entrenador".
Pero además de la falta de triunfos, el extécnico del Rayo Vallecano tiene que lidiar con la presión de la falta de títulos del el equipo, una sequía que este año cumplirá 20 años.
Ese asunto ha sido por el que Jémez ha tenido roces con la prensa mexicana. Diez días después de su primer partido oficial, un periodista, en una rueda de prensa, le preguntó: "¿La llegada de usted es para levantar al equipo o para hundir al equipo?".
Jémez se tomó su tiempo y respondió: "¿Algo más? Algo serio. Si van a preguntar en serio respondo, si no...", y abandonó la sala de prensa ante lo que consideró una falta de respeto.
El miércoles, tras el partido de Copa en Oaxaca, un reportero le preguntó: "Ante la falta de resultados ¿está preparando sus maletas?".
El español mostró nuevamente su personalidad y dijo: "Eso es una falta de respeto y eso no se lo voy a tolerar a nadie. Usted preocúpese de su trabajo y yo me preocupo del mío".
El equipo de Jémez ha mostrado hasta ahora buen fútbol, un estilo definido y ha dominado a sus rivales, pero en el momento preciso no ha sido contundente. Ahora aguarda el partido del sábado, ante el Atlas, en la séptima jornada del Clausura 2017 para ver si regresa al camino de la victoria.