Trigueros da vida al Villarreal
La Real se puso 3-0 con goles de Willian Jose, Vela y Oyarzabal. Pero el Villarreal reaccionó y Trigueros marcó un golazo. Hubo polémica por un penalti no pitado en el descuento.
Real Sociedad-Sevilla en directo
La Real Sociedad encarrila la eliminatoria más igualada de los octavos de final después de ganar con claridad al Villarreal por 3-1 en Anoeta, en un partido que tuvo claro color txuri-urdin hasta el último cuarto de hora, cuando despertó el submarino amarillo para tener, incluso, opciones de llevar muy abierto el pase a la siguiente ronda en El Madrigal. El golazo de Manu Trigueros cambiaba el escenario de la película, porque el Villarreal pasa de necesitar cuatro goles a dos para voltear una eliminatoria que, eso sí, los donostiarras llevan con una ventaja muy clara, gracias a los goles de Willian José, Vela y Mikel Oyarzabal.
La Real Sociedad ha comenzado el partido mucho más metido que el Villarreal, al que curiosamente pareció afectarle el parón nada más arrancar por la brecha que se produjo Joseba Zaldua. Los donostiarras no entienden de parones, porque continuó con su buena dinámica con la que terminó el año pasado. Desde el principio. Sin hacer esperar a nadie. Mandando a través de la pelota, con la posesión como máxima indiscutible. Así, con esa dinámica, los realistas crearon las primeras ocasiones en los primeros minutos, con internadas por banda de Oyarzabal y Carlos Vela. Precisamente, un pase entre líneas fantástico del atacante eibarrés sirvió para abrir el marcador. Su asistencia no la desaprovechó Willian José, que resolvió de forma brillante, aunque poniendo algo de intriga. La Real ganaba al cuarto de hora del partido con lógica, porque el Submarino Amarillo apenas había hecho nada.
El equipo de Escribá, irreconocible, cedió todo el peso del partido al de Eusebio, que no desaprovechó ese regalo de Reyes anticipado para dominar el encuentro completamente y seguir teniendo acercamientos de relativo peligro. Aunque para regalo el de Mario y Asenjo, que a la media hora de juego no se entendieron y sirvieron el segundo gol en bandeja a Carlos Vela, que marcó a placer, a portería vacía. Una falta de comunicación y entendimiento inesperada e inexplicable que permitía a los donostiarras poner tierra de por medio en la eliminatoria, y que era el reflejo del pobre juego del Villarreal en Anoeta. Porque quitando cinco minutos de inspiración, estuvo desparecido, a merced de una Real mucho más inspirada y ambiciosa, y que se fue al descanso con la sensación de que la diferencia podía haber sido más abultada.
Tras el descanso, los donostiarras siguieron con la misma dinámica, y gracias a ello llegó el golazo de Oyarzabal que parecía, por fin, poner la eliminatoria totalmente a su favor. Pero respondió Manu Trigueros con otro zambombazo desde fuera del área ante el que podía haber hecho más Rulli, y el Villarreal se metió por sorpresa en el partido y en la eliminatoria. El submarino amarillo había estado desaparecido hasta entonces, y entonces tuvo opciones de volver a casa con una desventaja mínima cuando lo había visto todo perdido. Incluso, puede quejarse de un penalti no pitado sobre Samu Castillejo que lo hubiera cambiado todo. Pero hubiera sido un premio excesivo a un partido en el que los realistas hicieron más durante más tiempo para ganar y ponerse en franquicia en este disputado combate copero.