Bruno Gama y Joselu dan vida al Depor ante un Alavés que sesteó
El conjunto blanquiazul empató en 20 minutos. El Alavés fue mejor en la primera parte y se puso 2-0, en la segunda mitad se durmió y el Depor lo aprovechó.
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Deportivo y Alavés llegaban al primer duelo de 2017 plenos de confianza, y se puede decir que salen de él con sensaciones contrapuestas porque ambos mostraron su cara buena, pero también la mala. Los vitorianos, con un buen resultado para la vuelta, aunque con la impresión de poder dejar la eliminatoria casi resuelta y regalar la remontada. Los coruñeses, con el subidón de remontar dos goles, aunque con muchos momentos de duda e impotencia.
Los planes previos al encuentro tardaron muy poco, poquísimo, en saltar por los aires porque a los tres minutos el Alavés ya mandaba en el marcador. Un centro de Feddal desde la izquierda, acompañado de un Arribas que midió mal, permitió a Christian Santos realizar un control con el pecho para quedarse solo ante Rubén y definir con calidad.
Con el gol en la mochila, los vitorianos dieron un paso atrás en busca de una contra para rematar a un Depor herido. Los coruñeses sólo dieron cierta sensación de peligro en las jugadas a balón parado (Arribas tuvo la más clara para enmendar su error pero no acertó) y el talento de Çolak. Pero lo cierto es que Ortolá no sufrió. Bruno Gama y Marlos lo intentaban por las bandas, pero con ínfimo peligro. El otro recurso, Joselu, apenas aparecía. El gallego, sin un bregador cerca como Andone, baja su rendimiento, como ya sucedió en el anterior cruce ante el Betis.
La cercanía del descanso lanzó al Depor, pero el que encontró premio fue el equipo de Pellegrino en un más que discutible penalti de Mosquera sobre Llorente. Lo cierto es que Hernández Hernández no dudó y Edgar, tampoco.
El paso por el vestuario no despertó al Depor, más bien lo terminó de dormir. Sin reacción, sin fútbol y con un Llorente que se iba adueñando del partido, Garitano optó por buscar un golpe de efecto con la entrada de Guilherme y, sobre todo, el canterano Pinchi. La vida, sin embargo, llegó por la vía Bruno Gama, desparecido hasta entonces. El luso pilló frío al exblanquiazul Raúl, al que dejó seco con un caño para repetir luego suerte ante Ortolá.
El gol dio aire y fe al Depor, que se fue a por el empate con un remate de Joselu, un posible penalti de Ibai sobre Juanfran que se quedó en el limbo y un testarazo de Albentosa al que Ortolá respondió con una gran parada. Todo parecía resuelto, hasta que el minuto 93 una falta de Bruno Gama acabó en el 2-2 de Joselu para darle vida a una eliminatoria que llegó a parecer decidida.
