El Lega pide a LaLiga debutar en Primera lejos de Butarque
Las obras para la instalación de gradas supletorias harán que, salvo sorpresa, el Leganés debute en Primera fuera de su estadio.
El calendario para la próxima temporada aún no se conoce (lo hará el 15 de julio) pero, salvo sorpresa, el Leganés debutará en Primera fuera de casa, lejos de Butarque. El equipo pepinero ha solicitado a LaLiga que la primera jornada del campeonato no se dispute en su feudo, sino que sea, mínimo, siete días más tarde, entre el 25 y el 28 de agosto, cuando albergue como local un partido de la máxima categoría.
Las obras de ampliación de sus gradas son el motivo que se esconde tras esta petición ante la que el organismo ha sido receptivo. Lo normal, insisten, en Leganés, es que la institución que dirige Javier Tebas cumpla con sus deseos y dé luz verde a este calendario ‘condicionado’.
Hay que recordar que, fruto de las negociaciones entre el Ayuntamiento y el Leganés, Butarque ampliará su aforo para la nueva aventura del equipo de Asier Garitano en la élite. Inicialmente se anunció que los trabajos de mejora de la capacidad se realizarían mediante la incorporación de gradas de obra, una posibilidad que, por ser compleja y laboriosa, no tomaría forma hasta casi el final de campeonato.
Dicho con otras palabras: el Lega iniciaría la Liga sin un solo asiento más, un problema considerable sobre todo en materia de abonados toda vez que los 6.100 socios con los que se terminó la pasada campaña representan ya el 73% del actual aforo pepinero.
La directiva solicitó retrasar esos trabajos y proceder a la instalación de gradas supletorias, alternativa que permitiría ampliar el aforo ya para el inicio de la Liga, aunque se tuviera que renunciar a 1.500 de los 4.000 asientos nuevos previstos inicialmente. El consistorio aceptó la idea primando antes la disponibilidad que la capacidad.
Así pues, Butarque contará con 10.500 asientos frente a los 8.138 actuales gracias a la implementación de 2.500 butacas distribuidas en gradas supletorias que se desinstalarán una vez termine la temporada para comenzar, esta vez sí, la construcción de las gradas definitivas. Haya descenso o haya permanencia, Butarque tendrá para la 2017-2018 una capacidad definitiva de 12.000 localidades, todas de obra, inamovibles.
Aunque la lógica dice que las gradas supletorias estarán listas para finales de agosto, el contrato entre la constructora y el Ayuntamiento incluye una serie de cláusulas de penalización que reducen el precio de la inversión en caso de que la empresa no cumpla con los plazos previstos.
Además de estos trabajos, Butarque mutará otros múltiples detalles de su fisonomía. Se levantará una Unidad Central Operativa (UCO) desde la que se controlará la seguridad del estadio. Estará dispuesta en el ala izquierda de lo que antes era la tribuna de prensa. También se añadirá un nuevo acceso al fondo sur, lo que permitirá a la afición visitante acceder a sus asientos sin mezclarse con los hinchas blanquiazules. Vestuarios, megafonía, palco o alumbrado serán otros elementos que se optimizarán.
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