FAZ: Infantino forzó la salida de Scala, que dimitió el 14-M
"Estamos viendo si es posible que dimita. Si no lo hace, preguntaremos a los delegados para que se apruebe en el Congreso", decía el presidente un día antes.
El presidente de la FIFA, Gianni Infantino, quedó hoy envuelto en una polémica debido a la publicación de una presunta cita suya que refleja su intento de forzar la salida de Domenico Scala, jefe del órgano principal de vigilancia del ente rector del fútbol mundial.
"Estamos viendo si es posible que dimita. Si no lo hace, preguntaremos a los delegados por esta cuestión para que se apruebe en el Congreso", dijo Infantino en el Congreso que celebró la FIFA el 13 de mayo en Ciudad de México, según el diario alemán "Frankfurter Allgemeine Zeitung".
"El Congreso tendrá que decidir, es una decisión democrática. Creo que es mejor si sale del Congreso en vez del Consejo en una o dos semanas. Porque entonces parecería que fuera un tema personal y no lo es", añadió el dirigente suizo según el "FAZ".
Scala, también suizo, presentó su dimisión el 14 de mayo en protesta por una polémica medida adoptada por el Congreso de la FIFA. Según la nueva norma, el Consejo, principal órgano ejecutivo del organismo, tendría el poder de decidir sobre los miembros de los comités de control al menos hasta 2017.
La FIFA no quiso comentar la publicación del diario de Fráncfort, aunque el domingo rechazó cualquier tipo de complot contra Scala, uno de los principales arquitectos del programa de reformas de en el organismo desde que estalló hace un año el "FIFAGate".
El "FAZ" recoge también una queja de Infantino por su salario de dos millones de francos suizos (1,8 millones de euros o 2,02 millones de dólares), cuyo monto fue fijado por una comisión encabezada también por Scala.
"No acepté esta propuesta. Era una propuesta que me parecía insultante", dijo supuestamente Infantino, que en rigor no tenía derecho a rechazar el monto de su salario.
El presunto roce con Scala y la propuesta de Infantino en el Consejo generaron algunas críticas, en particular del británico David Gill, que lamentó como "una situación increíble" lo ocurrido.
También el jefe de la federación estadounidense, Sunil Gulati, fue citado también por el "FAZ" diciendo: "No podemos actuar de este modo. No podemos destituir personas sin ninguna base escrita y sin ningún hecho". Gulati intentó al parecer llegar a una solución de consenso antes de la sesión del Consejo, aunque sin éxito.