Pina: "Mis jugadores querrán ganar al Barça. Es su obligación"
El Granada quiere vestirse de Tenerife. “Tengo hambre, quiero ganar y vamos a prepararlo para competir lo mejor posible. Que a nadie le quepa duda”, dijo José González, su técnico.
El Granada ha sido invitado a la fiesta en la que se decidirá el campeón de Liga. Sin pretenderlo, el conjunto de Pina se puede convertir en juez del campeonato. Con la permanencia ya matemáticamente asegurada, afrontará el encuentro ante el Barcelona sin presión, dispuesto a jugar un buen partido y brindar a su afición un triunfo que sería el colofón a una temporada que ha finalizado de la mejor forma posible.
El presidente Quique Pina, por si acaso cabe alguna duda o alguien tiene la tentación de bajar la guardia, dejó claro que el equipo saldrá a por todas como en tantas otras tardes. “En cuanto a relajación, ninguna. Sabemos que se están jugando una Liga el Barcelona y el Real Madrid y estoy convencido de que mis jugadores querrán ganar ese partido por la gran importancia que tiene, además de que es su obligación”, explicó Pina.
Los mensajes que llegan del vestuario son tan o más rotundos que el del presidente. José González, lanzado y eufórico después de conseguir la permanencia, pretende prolongar el gran momento que vive el equipo brindando a Los Cármenes un partido de esos que sobrevivan al paso del tiempo. “Tengo hambre, quiero ganar el partido, quiero ganar al Barcelona y vamos a preparar el partido para competir lo mejor posible. Que a nadie le quepa duda”, dijo el entrenador gaditano con media sonrisa en la cara.
Entre 75 y 150 euros, el precio de las entradas
La fiesta de la permanencia estará reservada para los abonados y para quienes estén dispuestos a dejarse en la entrada un buen puñado de euros. El Granada ha puesto a la venta las localidades para la cita del sábado (17.00 horas) que oscilan entre los 75 euros de las esquinas y los 150 de tribuna. En los fondos el precio es de 100 euros y 125, en preferencia. Los abonados del Granada no pagan el precio de la misma al estar incluida en el abono de temporada. Se espera una gran afluencia de público, incluso de fuera de Granada, por la posibilidad de ver cómo el Barcelona canta el alirón.
Cena y fiesta tras la permanencia
La fiesta se alargó alta altas horas de la madrugada. Lo que llegó después de la victoria en Sevilla fue la crónica de una celebración con todos sus ingredientes, cena, baile y diversión. Pasadas las doce de la noche cuerpo técnico, dirigentes y plantilla del Granada, con sus respectivos acompañantes, comenzaron la velada alrededor de una mesa en un restaurante del área metropolitana, una cena que se alargó hasta más de las dos de la madrugada. Entre risas, recuerdos de anécdotas y juramentos de futuro, Pina y los suyos brindaron por el éxito consumado en el Sánchez Pizjuán. La siguiente estación fue una conocida discoteca de Granada que tenía preparado un reservado para todo el grupo. Allí cientos de personas festejaron junto a ellos la permanencia. A partir de ahí, cada uno con su suerte fue consumiendo la noche hasta que les sorprendió el amanecer.
