ATLÉTICO DE MADRID - BARCELONA
Simao: “Si el Atlético es papá y el Barça mamá, iré con papá”
Con pasado azulgrana y atlético, el futbolista portugués espera con interés el partido de esta noche. Va con el Atlético de Madrid de Simeone. Analizó el encuentro para AS.
Atlético - Barcelona en directo
P.- ¿Ya tiene decidido dónde verá el partido?
R. No, pero en el Calderón me cuidan bien y siempre tengo un asiento, por si acaso.
P.- A eso se le llama enchufe.
R.- En el Atlético la gente es muy agradecida.
P.- ¿Vio la ida?
R.- En diferido. Estuve en Múnich viendo el Bayern-Benfica.
P.- ¿Y saludó a Guardiola?
R.- Sí. Cuando era futbolista ya se le veían maneras de entrenador, tenía algo diferente que el resto. Era un erudito, una persona que hablaba con criterio, que veía dónde nadie llegaba. Tiene cosas que le hacen ser especialy los futbolistas creen en él.
P.- ¿Cómo qué?
R.- Mire, un ejemplo. En el Bayern-Benfica hizo que Lahm jugase de medio cuando atacaba y de lateral a la hora de denfender. Eso es saber sacar rédito a la plantilla.
P.- Vayamos al partido. ¿Cómo lo ve?
R.- Intenso. Los Atlético-Barça siempre dejan cosas interesantes, detalles a analizar. En la ida, hasta la expulsión de Torres, Simeone lo tenía todo muy controlado y el Barça daba sensación de estar tocado, sin ideas. Después de la segunda amarilla, todo cambió y los culés fueron superiores al tener un jugador más.
P.- ¿Y con quién va usted?
R.- Si el Atléti es papa y el Barça, mamá, voy con papá.
P.- ¡Anda!
R.- Al Barça llegué muy joven y estuve sólo dos años. Pedí salir del club, ya que deseaba jugar más. En el primer año de azulgrana tenía a Figo por un lado y a Rivaldo por otro.
P.- Complicado jugar.
R.- Claro. Y en el segundo, el club entró en una dimensión rara, en la que siempre había problemas. Se fueron muchos jugadores, entraron también muchos. Así que decidí regresar a Portugal.
P.- ¿Le pesó que le compararan siempre con Figo?
R.- Luis era de los mejores del mundo, sin duda. Y no fue sencillo tener esos comentarios constantemente en boca de todo el mundo.
P.- ¿Se alegró de volver a Portugal?
R.- El Benfica apostó y pasé años muy buenos allí antes de regresar a España.
P.- ¿Qué recuerda de su paso por el Calderón?
R.- Muchas cosas y todas buenas. Allí jugué muy bien, me sentí líder del equipo, hice goles, encontré amigos y lo más importante para un futbolista profesional.
P.- ¿El qué?
R.- Levanté títulos.
P.- Con Sánchez Flores, ¿no?
R.- Sí. ¡Otro gran entrenador! Ahora es un amigo. Mi relación con él comenzó hace muchos años. Es más, estando él en el Valencia me quiso fichar del Benfica, pero no se dio.
P.- ¿Lo está siguiendo en el Watford?
R.- ¡Claro! Y no me sorprende. Dispuso en un grupo de futbolistas humildes una práctica realmente interesante.
P.- Simeone se lleva los éxitos, pero ¿podemos decir que todo arrancó con Quique?
R.- El Atlético actual tiene una mentalidad muy dura, muy férrea y eso es indispensable para tener al equipo allí arriba. Ese es su sello personal, el tener al equipo metido desde el primer día de pretemporada hasta que se acaba la temporada.
P.- ¿Qué partido espera?
R.- El Barça saldrá a hacer su fútbol y el Atlético buscará el gol sin prisa, aunque apretando en todo momento. Será un espectáculo táctico en todos los sentidos. Estoy seguro de que Simeone tendrá alguna carta guardada hasta el final.
P.- ¿Qué papel ha de tener el Tridente?
R.- Messi, Neymar y Suárez. Esos tres jugadores juntos son el pasaporte a levantar títulos.
P.- ¿Qué le parece la temporada de Messi?
R.- Ahora le toca al Barça tratar de recoger todo lo sembrado. Mientras el triunfo de Cristiano se basa en lo físico, en el trabajo a diario y de pensar exclusivamente en el fútbol, lo de Leo es algo natural. Nada me haría más feliz que el tiempo no pasara para ellos y que pudiesen jugar una década más.
P.- Por atrás viene con fuerza Neymar.
R.- Otro fenómeno que lo tiene todo para ser el mejor, pero deberá esperar un tiempo para ser el Balón de Oro.
P.- Pues esos son los que amenzan al equipo de Simeone.
R.- Le diré que mi final soñada sería un Atlético-Benfica.
P.- Nada más que decir. Queda claro.