Ocasión en el Vèlodrome, el gran calvario de Míchel
El Olympique Marsella encadena diez partidos ligueros sin ganar en casa. El Athletic ligó victorias seguidas fuera ante Partizán y Augsburgo.
Ernesto Valverde dio descanso ayer a los leones tras el despliegue físico en el Santiago Bernabéu. Ha querido que cojan fuerzas para la visita al Vèlodrome de Marsella, donde el Athletic quiere apretar a los de Míchel el jueves para poner de cara la eliminatoria. El ex del Real Madrid está viviendo un auténtico calvario en casa: no ha ganado en los diez últimos partidos ligueros ante su público
El OM no cosecha tres puntos en Marsella desde hace cinco meses, en el 4-1 al Bastia, que auguraba días de rosas, porque llegó justo después del 6-0 al Troyes, con el que se presentó en sociedad.
Los números de Míchel ante su público son muy pobres. Sólo Troyes y Toulouse han sacado menos puntos que él. Lleva dos victorias, siete empates y tres derrotas. En Europa League le ha ido mejor, ganó a Groningen y Braga, y perdió ante el Slovan Liberec.
No será por falta de ocasiones. Está echando de menos la puntería de Batshuayi, que marcó diez goles en las quince primeras fechas y lleva dos en las últimas once.
El Athletic, por su parte, llega con el aval que le dan sus dos últimos triunfos europeos a domicilio, ante Partizán (0-2) y Augsburgo (2-3). Tratará de generar problemas a la defensa gala, mermada por las lesiones de sus dos laterales titulares, lo que ha convertido a Manquillo en fijo.
Txingurri va a insistir a sus futbolistas en la importancia de presionar fuerte a la zaga marsellesa, que tiene problemas para conectar en medio campo con Lass e Isla.
Conocimiento. Si hay algo que marca el choque, es el amplio conocimiento que tiene el cuerpo técnico del Marsella del juego del Athletic. Míchel, Alkorta y Mandià saben a la perfección lo que pretende Valverde tácticamente. Ensayarán saltarse la presión adelantada con balones largos y tratarán de buscar la espalda a los laterales rojiblancos cuando suban. De Marcos tendrá una dura pelea con el peligroso N’Koudou.
La clave está en imponerse en el medio campo en el manejo del juego. Beñat debe marcar el ritmo bien escoltado por San José, que deberá vigilar al escurridizo Cabella, que marcó ante el PSG.