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VALENCIA 2 - BARAKALDO 0 (3-1)

Primera victoria para Gary Neville al frente del Valencia

El Barakaldo no inquietó, el técnico inglés salió con un equipo de titulares y Santi Mina y Negredo pusieron el 2-0 en media hora.

El delantero del Valencia CF, Santiago Mina celebra con sus compañeros el primer gol de su equipo ante el Barakaldo CF
El delantero del Valencia CF, Santiago Mina celebra con sus compañeros el primer gol de su equipo ante el Barakaldo CFMANUEL BRUQUEEFE
LALIGA

Hay partidos que se olvidan con el tiempo. Seguramente con éste sucederá lo mismo. Y eso que no dejó de ser el de la primera victoria de Gary Neville como entrenador. A fin de cuentas era algo que se daba prácticamente por hecho. Pero incluso en estas noches sin cabida en la leyenda, en las que la emoción había quedado en nada con el resultado en Barakaldo, en la que no hubo lugar a la sorpresa tras un madrugador gol de Santi Mina, lo dicho, hasta en este tipo de partidos, el fútbol demuestra que está vivo, que deja siempre detalles y, sobre todo, da oportunidades.

La tenía Álvaro Negredo. Uno puede pensar que a sus años no tiene nada que demostrar. Menos contra un Barakaldo. Pero si él lo hubiera visto así se habría engañado así mismo. Y no lo hizo. Gary Neville sabía cuando llegó que tenía un delantero de 30 millones por recuperar (bueno, tiene dos, pero de Rodrigo Moreno ya se hablará). Negredo siente desde la llegada del inglés que el tren vuelve a pasar para él.

Por ello para el de Vallecas no era un partido sin historia. Era una noche para al menos escribir el prólogo de su nueva vida como blanquinegro. Y se hizo ver. No. No se crean que su actuación fue la ‘bomba’. Pero sí lo justo y necesario. Tuvo minutos para mejorar el físico; dejó algún detalle de lo mucho que puede aportar al estilo de juego que pretende Neville y, además, se reencontró con lo que le da de comer: el gol. Lo hizo por partida doble, aunque uno de ellos se lo birlaron por fuera de juego que no parecía. No es cogerse a un clavo ardiendo. Es creer que hay un clavo al que cogerse, que es distinto.

Por lo demás, la vuelta de Copa del Rey fue apacible, aunque tampoco el Valencia demostró nada distinto. Con un Barakaldo voluntarioso, sabedor de sus limitaciones, pero en todo momento bien plantado y sin perderle la cara al partido. Movilla tiene tácticamente aleccionados a sus chicos y estos jugaron para disfrutar del rival, del escenario y del torneo. Incluso a nadie le hubiera extrañado si se hubieran vuelto a Barakaldo con al menos un gol. Mat Ryan tuvo que aparecer en dos ocasiones y en una tercera, con un disparo desde la frontal de Ito, el balón se marchó por poco. Fue en la fase en la que Neville apostó por la Academia. De inicio lo hizo con Zahibo, después con Fran Villalba (al que el técnico inglés compara con David Silva) y Diallo. Ninguno desentonó.