“El Barcelona no siempre entendió a los culés de España”
El presidente de la Junta de Extremadura es un culé confeso que hasta fundó la peña de su pueblo y defiende a los seguidores del equipo azulgrana que viven fuera de Cataluña.Sevilla-Atlético Madrid: Vuelta Cuartos Final Copa
—¿Cúal es el primer Barcelona que recuerda?
—¿El que recuerdo o que vi? El que primero que recuerdo es este: Sadurní; Benítez, Gallego, Eladio, Muller, Zabalza, Rifé, Zaldua, Mendoza, Fusté y Oliveros. ¡De carrerilla! Y el primero que vi en directo fue en el Camp Nou, donde aunque no se lo crea fui de viaje de novios.
—¿Y sigue con su mujer?
—Sí claro, a ver un Barça-Real Sociedad.
—Pero lo había visto antes...
—Sí, lo había visto jugar en Sevilla, cuando vivía en Córdoba o en Madrid. Allí vi bastantes veces al Barça de Maradona. Estuve en el famoso partido de la Copa de la Liga del regate a Juan José, que se dio contra el palo. Este verano le vi cojear y le dije que si aún le dolía el golpe.
—¿Y en el Camp Nou?
—Vi en un fin de semana al Barça ganar la Liga de fútbol ante la Real Sociedad, al equipo de basket ganar la Liga ante el Jovenut y al de balonmano ganar también su Liga. Fue en mayo del año 90 si no recuerdo mal.
—¿Cómo sale usted tan fanático del Barça?
—Mi madre explica que cuando tenía dos años paseaba por la calle por delante de la juguetería antes de Reyes y ya me paré en el escaparate para señalarle la camiseta del Barça.
—¿Imagino que no había muchos niños del Barça?
—En mi familia, todos mi tíos y primos mayores eran del Atlético y mi padre era del Espanyol.
—¡Qué me dice!
—Por Zamora, había jugado de portero y eso le influyó.
—¿Se siente usted como la voz de los culés de fuera de Cataluña que no ven con buenos ojos el proceso independentista?
—Yo quiero mucho al Barça, pero cuando he tenido que decir lo que pienso lo he dicho y este es un caso. No es que quiera mucho al Barça, es que me siento del Barça. Fundé la peña de mi pueblo y el Barça forma parte de mi vida y de la de mis hijos. He ido con la familia a pasar fines de semana a Barcelona, pero no sé si siempre se ha entendido desde Barcelona demasiado bien lo que representan los culés de la diáspora.
—Explíquelo.
—Yo recuerdo un partido del Barça en Lisboa ante el Sporting en el que había gente cantando el himno del Barça en el gol sur en catalán y yo le dije al entonces presidente, Joan Laporta: “Esa gente son extremeños de un pueblo que se llama Medina de las Torres y han venido aquí a ver el partido después de trabajar y cuando acabe se vuelven para volver a entrar a trabajar a las seis de la mañana, no olvidéis que eso es una realidad que forma parte del Barça.
—¿Y Laporta lo entendió?
—Sí, yo creo que lo entendió.
—Pero luego se pelearon...
—Hubo un enfrentamiento, pero para mí está olvidado. (Fernández Vara criticó a Laporta en un artículo por utilizar el Barça como trampolín político. Luego trascendió que Laporta le llamó “barcelonista de mierda” y 10 veces “imbécil”).
—Nada más tomar posesión en el cargo, Rosell viajó a Extremadura como disculpa, ¿cómo son sus relaciones con la junta actual?
—Muy buenas, he hablado con mucho cariño con el presidente actual y saben que aquí tienen a su familia.
—¿Usted no entiende que ser del Barça comporta asimilar unos valores de defensa de Cataluña?
—Sí, pero hay mucha gente que lo está pasando mal y que se preocupa por la unidad de España y que se pueda romper un proyecto de convivencia común y luego hay mucha gente que aprendió a querer a Cataluña cantando el himno del Barça aunque no entendieran la letra. Me consta que este sentimiento lo han cuidado a través de las peñas.
—¿Con qué personaje del Barcelona se tomaría una caña?
—Sin ninguna duda, con Johan Cruyff. Soy cruyffista.
—¡Anda, como Laporta!
—Es que Cruyff nos dio una alegría a toda una generación. Piense que en 16 años no vi al Barça ganar una Liga.
—A lo mejor este tema le sirve para reconciliarse con él...
—Después del incidente hablé con Ángel Villar para poder hacer las paces, porque no quería acabar mal con Laporta, pero no hubo respuesta.