NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

GRUPO E | BARCELONA - BATE BORISOV

El socio del Barça no da tregua

Enorme pitada al himno de la Champions League y masiva exhibición de esteladas en un claro desafío a la UEFA. Aunque fue la peor entrada del curso en el Camp Nou.

Esteladas en el Camp Nou.
Esteladas en el Camp Nou.Pol Solà

Camp Nou no entiende de treguas. Poco importa la teórica tregua entre el Barcelona y la UEFA al público del Camp Nou, que aprovechó el encuentro ante el BATE Borisov para dejarle muy claro al máximo organismo del fútbol europeo que una cosa es lo que haga la junta en sus reuniones pedagógicas en Nyon y otra el sentir de la grada. El soci blaugrana sacó la estelada del armario y se dirigió a su localidad con un único objetivo: soportar el partido ante los bielorrusos, silbar el himno de la Champions y exhibir su estelada, ya sea regalada en la entrada o trayéndosela de casa. El delegado de la UEFA para el Partido, Mr Nilsson, presidente de la Federación sueca, no daba abasto en los compases iniciales del encuentro fotografiando y grabando el ambiente del estadio.

Un voluntario reparte esteladas en el acceso al Camp Nou.
Ampliar
Un voluntario reparte esteladas en el acceso al Camp Nou.ALBERT GEA

Agotadas. Una hora antes de que empezara el partido en el Camp Nou, a los voluntarios de la ANC (Assemblea Nacional Catalana) les faltaban manos para repartir esteladas a los asistententes al partido en las zonas nobles del campo. La pregunta recurrente en los aledaños de la tribuna del Camp Nou era “¿le quedan esteladas?” o “¿dónde puedo conseguirlas?”. Las banderas catalanas con el triángulo azul y la estrella en el medio imitando la tradición de la bandera cubana como símbolo de independencia de España se habían agotado. En otras zonas más combatibas del recinto, como lateral, o Gol Sud, los que las repartían se quejaban de que les costaba colocar el género: “Es que estos ya las traen de casa”. Ni la tregua acordada por el club y la UEFA un día antes del partido respecto a los expedientes abiertos contra el club por la exhibición de símbolos políticos no hizo flaquear la moral de los irreductibles independentistas. Incluso los reventas de última hora y los lateros de cervezas de ocasión vendían sus productos con una estelada sobre los hombros.

No se lo perdieron. En el palco del Camp Nou, nadie quiso perderse el espectáculo de las exhibición de banderas. El President de la Generalitat, Artur Mas, el conseller de la presidència Francesc Homs, el conseller de Cultura Ferran Mascarell y también el líder de Esquerra Republicana de Catalunya, Oriol Junqueras, no se perdieron el partido. En el minuto 17:14, con las esteladas al viento y el estadio pidiendo In-inde-independencia! volvieron a sonreír como en la pitada al Himno en la final de la Copa del Rey ante el Athletic Club en el propio Camp Nou.

Poca entrada. El campo no se llenó, pero la ratio estelada/espectador era la más alta de la historia del club. Hay que señalar que a pesar de que tanto las organizaciones responsables del reparto de banderas independentistas como el propio club aseguraban que el Barcelona como institución nada tenía que ver en el reparto, cada uno de los 300 voluntarios que repartían banderas tenía asegurada una entrada para presenciar el partido. Si se las facilitó el Barça o las entidades independentistas es algo que queda en el secreto de sumario. Puede que lo de las banderas fuera forzado en mayor o menos medida, pero que el Barça y la UEFA tienen un problema está más que claro.