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GRUPO C | ASTANA - ATLÉTICO DE MADRID

El moderno Astana Arena sólo luce en la Champions League

El estadio del rival del Atlético costó 170 millones pero en liga se le ve casi vacío. Preocupa a los gestores deportivos que quieren impulsar el fútbol.

El Astana Arena, con su cubierta retráctil, durante un partido de su selección.
Getty

El Astana Arena es una joya más dentro de la monumental capital kazaja. Es un estadio vanguardista y de una estética futurista englobado dentro del faraónico proyecto urbanístico del presidente del país y también del club, Nursultán Nazarbáyev. Casi 170 millones de euros costó el coliseo donde juega habitualmente el Astana y también la selección kazaja, un campo de césped artificial con capacidad para 33.000 personas cobijadas por un techo retráctil que permite mitigar, en parte, las tremendas temperaturas bajo cero que se alcanzan en la ciudad. Un estadio cuatro estrellas, pero con un lunar.

Cemento, mucho cemento se ve durante la inmensa mayoría de los partidos del equipo. Lo habitual es que apenas se llegue a las 3.000 personas en el campeonato doméstico. Y preocupa. El fútbol ha pasado a ser una prioridad para el país a la altura del hockey, el boxeo, la lucha, el baloncesto o el fútbol sala. Se quiere situar a este deporte entre las preferencias de la población y el Astana ha colaborado siendo el primer club en disputar la Champions. Pero el público no acude en la liga. Encuestas, foros, debates… cualquier cosa para pulsar la opinión de los kazajos y saber qué echan de menos para acercarse a los estadios.

En ese sentido, el diario kazajo Sports elaboró hace unas semanas una consulta a más de 10.000 aficionados al fútbol para preguntar de qué manera aumentaría su afluencia a los encuentros. La mayoría, el 52% de los encuestados, afirmó que elevar la calidad de los futbolistas sería la mejor manera, por delante de invitar a jugadores famosos a que formen parte de algún equipo al modo de la Superliga India (19%) o incluso más que la entrada a los estadios sea gratuita (10%).

Ante el Irtysh, en el último partido del playoff por el título de la liga kazaja, el Astana Arena registró una asistencia de 2.600 personas. La mejor entrada doméstica del playoff tuvo lugar en el casi decisivo duelo ante el Kayrat, con 11.500 aficionados en el campo. Y es que sólo la Champions engancha. Los partidos ante Helsinki (27.937), Maribor (23.650), APOEL (30.000) y Galatasaray (27.264) dieron el lustre que se espera para esta ambiciosa construcción. Con el Atlético también será así. Ya hay muchos sectores completos con unas entradas que van desde los 12 euros de las más baratas hasta los 39 de las más caras.