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JUVENTUS - BARCELONA | ARCHIBALD

“Fue un gol raro, pero fue gol”

En la memoria del seguidor culé siempre habrá un hueco para Steve Archibald. Petición expresa de Venables. El escocés recuerda en AS la eliminatoria contra la Juve de 1986.

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Archibald reside desde hace tiempo en Barcelona.
Archibald reside desde hace tiempo en Barcelona.Carlos Mira
AStv

En la memoria del seguidor culé siempre habrá un hueco para Steve Archibald. Petición expresa de Terry Venables, el escocés aterrizó en Barcelona casi medio obligado por el Tottenham, necesitado en una venta que le reportase aire a base de millones. El presidente Núñez iba a ciegas y no entendía cómo pudiendo contratar a Hugo Sánchez, entonces en el Atlético de Madrid, el entrenador inglés se decantó por un jugador que apenas conocía el soci (en la campaña 1983-84, Archi hizo 33 goles con los Spurs). “Hugo y yo estábamos en el mismo hotel esperando la decisión, aunque no hicimos nada por vernos”, recuerda Archibald, entregado a sus negocios y colaborador de un proyecto relacionado con el fútbol y las fundaciones en Estados Unidos (www.soccerstreets.org).

El escocés llegó al Barça casi en silencio, “pero pronto la gente comenzó a pasarlo bien con el equipo. Después de 11 años, ganamos la Liga y jugamos la Copa de Europa”, rememora evitando ser preguntado sobre la final de Sevilla: “Se me olvidó todo lo que allí pasó”, dice en tono serio.

Antes de caer en los penaltis ante el Steaua, el Barça­ tuvo que medirse a la Juventus. Fue en los cuartos de final y era la primera vez que se medían. “Era una final anticipada. Ellos venían con Laudrup, Boniek o Platini, pero nosotros jugábamos muy bien al fútbol”, explica. Un gol de Julio Alberto en la ida (un zurdazo desde 25 metros) dejaba la vuelta muy abierta. Y fue Archibald el que comenzó a cerrar el pase a unas dramáticas semifinales ante el Goteborg. “Carrasco fue clave. Él entraba solo en el área, mientras yo intentaba descifrar dónde iba el centro de Víctor. Aproveché el desconcierto que creó Carrasco para rematar medio con la cabeza, rozando la oreja y engañando a Taconi. Fue un gol raro, pero fue gol y eso nos valió para eliminar al mejor equipo de Europa”, explica feliz.