Sergio García contra el fuego del Sevilla en el Sánchez Pizjuán

Aún quedan 93 minutos”. El Sevilla ha organizado su conjura abrazado al recuerdo del gol agónico de Mbia en Valencia. De ahí el eslogan del vídeo promocional del partido. Es verdad que últimamente y por las gestas europeas ante Betis y Oporto, el milagro de Mestalla y el título de Turín, el Sevilla se sintió invencible. En los dos últimos partidos, sin embargo, ha encajado un 2-6 de parcial y levantar el 3-1 de Cornellà parece ahora lejos. Primero, porque el Espanyol es uno de los equipos más intensos de la competición a día de hoy. Muerde en defensa y pica en ataque con los excepcionales Sergio García, Stuani y Caicedo. Además, la acumulación de partidos ha ido dejando sevillistas en el camino: Reyes y Tremoulinas están rotos, Krychowiak maltrecho, y Mbia en África.

Aun así, se intuyen llamaradas en Nervión, que cree en la remontada. “Este partido ya lo hemos vivido, jugado y ganado”, ha insistido Monchi esta semana. Hay de hecho más palabras que argumentos futbolísticos estos días en el Sevilla. El gol de Bacca en el último suspiro del choque de la ida, sin embargo, da esperanzas al Sevilla.

En el Espanyol, mientras, la pasión es igual. Campeón en 2000 y 2006, entiende el torneo y suele atinar cuando llega a las rondas finales. Su estado de optimismo sólo se ha visto enturbiado con la posible marcha de Stuani en este mercado invernal. Pero ahí, precisamente, es donde menos problemas tienen los pericos, con Sergio García y Caicedo preocupantes para la defensa del Sevilla, que saldrá en tromba. Casi seguro con dos delanteros, puñales en las bandas y la obligación de que Banega y Denis tengan un día inspirado en la creación. Que sean 93 minutos, por cierto, no dependerán del vídeo sino de Martínez Munuera. Huele a noche loca de Copa.

Sólo un gol encajado en 4 choques

La clave del partido para el Espanyol será marcar un gol que acabe con las ansias de remontada del Sevilla, para lo que cuentan con un inmejorable tridente: entre Felipe Caicedo, Sergio García y Cristhian Stuani suman 28 goles esta temporada entre Liga y Copa del Rey. Pero no menos importante será el capítulo defensivo. En ese sentido, la racha con la que los de Sergio González llegan al Pizjuán no es menos prodigiosa: solo ha recibido el Espanyol un gol en sus cuatro últimos compromisos, ante Valencia (2-0), Celta (1-0), Sevilla (3-1) y Almería (3-0).