MANCHESTER UNITED 0 - SOUTHAMPTON 1
El milagro del Southampton también acaba con el United
Un gol de Tadic a los cinco minutos de salir al campo decidió un encuentro sin ocasiones. El United no disparó a puerta y pierde tras diez jornadas invicto.
El Manchester United ha sabido reconducir un pésimo inicio de temporada, pero todavía exhibe sus múltiples carencias cada fin de semana. Ante el Southampton le han costado tres puntos, la primera derrota en diez jornadas y la pérdida del liderato de la otra liga, la que no juegan Chelsea y Manchester City.
Louis Van Gaal repitió en la pizarra la fórmula que ha dado más estabilidad al United, pero no funcionó contra un rival competitivo y sacrificado. Su empeño por jugar con tres defensas y dos carrileros le ha resultado mientras Ángel Di María ocupaba un puesto en la enfermería. Sin embargo, no parece eficiente obligar al argentino a desempeñarse como delantero centro ahora que está de regreso. Aún así, un Di María con sus cualidades diluidas entre zagueros fue el mejor de la primera parte y no dejó de buscar el gol, al menos desde fuera del área.
El Southampton jugó su partido de contención y forzó 45 minutos de tanteo en la primera parte. Cuando volvió de los vestuarios metió otra marcha al encuentro y decidió probar suerte en el arte del contraataque. Jugaron varias rondas y acertaron en una: Tadic entró con fuerzas renovadas y habilitó a Pellé, que remató solo. El poste evitó lo que no pudo salvar De Gea, pero el propio Tadic se encontró el rechace y definió a placer con la zurda para dejar como tercer clasificado al equipo de Ronald Koeman, la revelación de la Premier League.
Comenzó entonces el asedio local, limitado por las ausencias. Ashley Young se perdió el partido por lesión y Falcao por decisión técnica. Una decisión de Van Gaal difícil de comprender, porque su equipo terminó atacando con Fellaini como punta. Mata asumió toda la responsabilidad y dispuso de tres ocasiones para sumar un punto y no perder tres. No lo consiguió y el United se marchó sin un remate entre los tres palos. Y así es imposible volver a ser la referencia del fútbol británico.