El futuro del entrenador culé
El Málaga quiere al Tata y el Villarreal tampoco lo descarta
En La Rosaleda nadie quiso confirmar ni desmentir esta información. En el Villarreal gusta el trabajo de Marcelino pero a Martino ya lo tantearon un par de veces en el pasado.
Gerardo Martino es un técnico con una reputación intacta. En pocos días debería anunciar de manera oficial sus intenciones para la próxima temporada, aunque todo indica que su etapa al frente del primer equipo azulgrana está finiquitada. Ya antes de fichar por el Barcelona, tuvo opciones de firmar por un equipo de la Liga. El primero en contactar en su día fue el Villarreal (lo hizo por dos veces); luego se sumaron a la puja la Real Sociedad y el Málaga. Todos siguieron de cerca sus métodos y los interesados quedaron prendados de su manera de trabajar, pero Martino dejó pasar esas opciones hasta que por su vida se cruzó la llamada del expresidente Rosell.
Pero vayamos por partes. A mediodía de ayer, la SER en Málaga anunciaba las intenciones del equipo blanquiazul de contratar a Martino, en caso de que éste decidiese abandonar el Camp Nou. Nadie del club andaluz quiso confirmar ni desmentir la información, aunque sí que recordaron que el pasado verano, Mario Husillos, director deportivo del Málaga, viajó hasta Rosario para entrevistarse con el Tata. El exfutbolista del conjunto andaluz era su principal valedor ante sus superiores, que buscaban un relevo de calidad tras la marcha de Manuel Pellegrini al Manchester City. Conscientes eran en La Rosaleda de que la Real Sociedad lo había tanteado y que para el preparador lo primero era la palabra; en ese sentido, Martino siempre lo tuvo claro y la prioridad siempre fue para su Newell’s, con el que llegó hasta las semifinales de la Copa Libertadores.
Marcelino. El técnico asturiano tiene contrato en vigor con el Villarreal y los gestores del club amarillo pretenden que siga construyendo el próximo proyecto deportivo en El Madrigal. Hay confianza absoluta en sus ideas, eso que quede muy claro. Pero eso no quita que al igual que el Málaga, los castellonenses también miraron siempre con muy buenos ojos el hacer de Martino. Llegaron a tantearle un par de veces: la primera cuando Martino era seleccionador de Paraguay; la segunda, cuando el Tata ya estaba en Ñuls y el Villarreal, increíblemente, había descendido a Segunda. Tanto la familia Roig como los ejecutivos del club consideraron que la filosofía del entrenador se adaptaría perfectamente a la de la entidad amarilla, pero nunca hubo un punto de encuentro oportuno entre todas las dos partes. El tiempo dirá qué pasa, pero es evidente es que a Martino no le faltan opciones en la Liga.