NewslettersRegístrateAPP
españaESPAÑAchileCHILEcolombiaCOLOMBIAusaUSAméxicoMÉXICOusa latinoUSA LATINOaméricaAMÉRICA

Atlético de Madrid - Real Madrid

Iker y Cristiano Ronaldo, contra el milagro de los rojiblancos

Raúl García será el punta de los locales y Aranzubia, el portero (Canal+ 1, 21:00). Los de Simeone, tocados por las bajas y la derrota en Almería. Regresa Varane a la titularidad.

Iker y Cristiano Ronaldo, contra el milagro de los rojiblancos

Normalmente, cuando un buen equipo pierde 3-0 en la ida de una eliminatoria a doble partido inicia de modo casi inmediato lo que podríamos denominar la ceremonia de la remontada. Se suceden las declaraciones optimistas, el público se anima y se recurre a la hemeroteca para encontrar hazañas similares. Los jugadores dicen podemos y los entrenadores, luego se sabe, llenan el vestuario de mensajes motivacionales. Se intenta. Por la taquilla, por el orgullo y porque todo es posible.

Desde que perdió en el Bernabéu, el Atlético ha afrontado el partido de vuelta sin entusiasmo aparente. Cierto es que había Liga y que los jugadores están adiestrados en el “partido a partido”. Cierto. También es verdad que las bajas (algunas sin recambio) han minado la moral y la plantilla. Diego Costa no jugará por sanción y Courtois se lo perderá por lesión. Igual que Tiago. Lo mismo que Filipe, cuya ausencia cada vez duele más: “Por su banda era por donde salía el equipo”, se lamenta el compañero Díaz-Guerra.

Sin embargo, con todo y con eso, falta un grito de esperanza, alguien que recuerde que dos de los goles en contra fueron de rebote y que el árbitro dejó cosas por pitar. Tal vez esa voz haya sido reprimida por Simeone, urdidor de una emboscada que no somos capaces de imaginar, comanches a ambos lados del desfiladero; no se los ve, pero están ahí, advertía John Wayne. O quizá la percepción sea real y el Atlético no se sienta capaz de plantar cara al Madrid al nivel que exige la eliminatoria. Tendría excusas: las bajas, los hados, la Liga y la Champions. Añadan la derrota en Almería y la inseguridad que ha generado.

Confianza. Para el Madrid el primer riesgo será pensar que todo está hecho, que el equipo está lanzado y que el Calderón cantará nanas. No será sencillo, ni con Cristiano de vuelta, ni con Casillas disfrazado de trébol de cuatro hojas (25 derbis sin perder). Existen cien alternativas que invitan al optimismo madridista (espacios, contras, abatimiento local...), pero hay una posibilidad que lo complica todo y es la de encajar un gol. Es justo en ese punto del desfiladero donde esperan los comanches.

Espíritus al margen, habrá novedades. En el Atlético se espera a Alderweireld, Mario Suárez y Sosa, con Raúl García de delantero centro. En el Madrid no habrá tantas piruetas: regresará Varane, por Sergio Ramos o Pepe.

Para Aranzubia quedará la oportunidad de redimirse o condenarse. Enfrente tendrá a Cristiano, Benzema y Bale, probablemente a la carrera, algunas veces cara a cara.

La historia sugiere el resto: el Atlético es un especialista en romper guiones y este parece escrito. Cuidado.