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Getafe 0-Rayo 1

Bueno da aire al Rayo, que alarga su pleno contra el Geta

Los franjirrojos no fallan en el derbi en Primera: cinco triunfos de cinco. Bueno marcó en el 29’ y le dio un justo triunfo a su equipo, que acabó sufriendo por perdonar demasiado.

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Bueno da aire al Rayo, que alarga su pleno contra el Geta

Caiga nieve o caliente el sol, el Rayo siempre acaba sonriendo cuando se las ve con el Getafe. En su quinto derbi en Primera, entre la niebla del Coliseum, los de Paco volvieron a ganar y ya van cinco victorias de cinco, ésta más necesaria que ninguna otra. Las broncas de Paco durante la semana parece que tuvieron efecto y el Rayo se comportó por fin como un equipo serio, sin regalos atrás y haciendo daño en ataque. El Getafe, que enlaza cuatro derrotas en Liga, lo intentó tras el descanso, pero sigue preocupantemente espeso. Le faltó fútbol y le faltó gol, y si llegó vivo al final es porque el Rayo le perdonó.

Además de los tres puntos, el Rayo sacó otra buena noticia: dejó su puerta a cero por segundo partido consecutivo. Contundente en defensa y presionando en el medio del campo, apenas dejó al Geta acercarse a Rubén. Los azulones empezaron mejor, pero el arreón les duró diez minutos. Viera estrelló el balón en la cara de Lisandro (Clos vio penalti, pero su juez de línea le corrigió) y Bueno probó a Moya de chilena antes del 0-1. En el29’, Lass chutó desde la frontal, el balón salió rebotado hacia la izquierda y Gálvez asistió a Bueno, que sólo tuvo que empujarla.

El gol dio calma al Rayo y dejó muy frío al Getafe, que sólo amenazaba a balón parado. Lass y Bueno lo intentaban y, tras un error de Rafa, Nery casi marcó el segundo. Pero el Rayo no aprovechó la caraja azulona y el Getafe se despertó tras el descanso. Borja y Ciprian probaron desde la frontal a Rubén, muy seguro en la portería pero con muchas dudas en cada balón colgado, y por ahí acabaría pasándolo mal el Rayo.

El Getafe seguía sin dar cuatro pases seguidos, pero al menos tenía el balón lejos de su área. Tampoco pasaba apuros el Rayo, con Gálvez crecido y Baena vaciándose en las ayudas. Hasta que, mediada la segunda parte, el partido se rompió. El Rayo empezó a encontrar espacios y a encadenar ocasiones a la contra, casi todas desaprovechadas por elegir mal. Embarba, Lass y Adrián perdonaron a Moyá por chutar en vez de pasar.

Y el Geta casi se lo hace pagar al final. Cada balón al área ponía histéricos a los rayistas y fue un milagro que no llegase el empate. Entre los mil rebotes que hubo en el área, la más calara para el Getafe la salvó Nacho sobre la línea, ya en el añadido. El Rayo coge aire y prolonga la maldición en el derbi contra un Getafe que necesita mejorar. A Paco le funcionó la bronca, igual debe tomar el ejemplo Luis García