Brahimi pone a prueba esta noche los nervios del Valladolid

Bajan las aguas revueltas por Los Cármenes y también por Pucela. La Liga alcanza el ecuador esta noche en Granada y, aunque los tiempos recomiendan guardar los cantos de urgencia, Granada y Valladolid necesitan dosis de tranquilidad en forma de puntos. A los locales les azota una especie de pesadilla en los partidos de casa, donde únicamente han sumado dos victorias en diez partidos oficiales. Aun así, el equipo rojiblanco mantiene una renta de cuatro puntos con el descenso y ha mostrado buenas maneras en muchos partidos.

Más ajustada ha sido la trayectoria del Valladolid, que se mantiene en el alambre sostenido por los 11 goles de Javi Guerra. Sin Ebert ni Álvaro Rubio, el malagueño se convierte en el salvavidas blanquivioleta a la espera de que Óscar recupere su mejor versión.

Alcaraz y JIM tienen en la retaguardia los puntos negros de sus equipos. Por ahí les han volado muchos puntos. Agujeros que han hecho aparecer los nervios y que también se los han llevado por delante en la Copa. El técnico granadino ha buscado aire fresco para sus futbolistas en La Manga tras el petardazo hace una semana en Almería. El alicantino concede galones de final al encuentro. Cerrar la primera vuelta con 16 puntos terminaría de hacer saltar todas las alarmas en Zorrilla. Sólo un gol les mantiene fuera del pozo.

Si JIM se pone en manos de Javi Guerra, Alcaraz volverá a encomendarse al talento de Brahimi, a su sociedad con El Arabi y a la pegada de Piti para buscar las cosquillas a su rival. Partido de máxima necesidad en Los Cármenes.