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Manu Carreño

"Esta Selección parece los Lakers de Magic, Scott..."

Manu Carreño contará hoy el España-Tahití de Confecup. Recuerda con AS los momentos que esta Roja le ha brindado en la cabina y los sueños que aún le quedan por cumplir.

Madrid
Manu Carreño.
Carlos Martínez

¿Cómo pinta esta Copa Confederaciones?
Pues pinta muy bien. Es atractiva para los futboleros. Italia, España, Brasil, Uruguay… ¡Imagínate que llegan los cuatro a semifinales! ¡Menudo cartel!
¿Ya es demasiado pensar que España puede ganar?
¿Por qué no? Pero también puede perder. Están Brasil, Italia… Nadie da por hecho que gane seguro. Pero si pierde luego está el Mundial...
¿Nos ha acostumbrado mal la Selección?
Sí, antes creíamos que íbamos a perder siempre y ahora, quizá, creemos que nadie nos puede ganar. Y La Roja no puede caer en eso, algún día perderá y no tendrá que ser dramático. La derrota forma parte del deporte.
¿El alegrón más grande que le había dado la Selección como espectador?
El España-Malta. ¿Quién no se acuerda del 12-1? Todo el mundo sabe qué hacía ese día, pero después… Recuerdo una serie que hice en C+, La historia de España en los Mundiales, y todo eran batacazos. Cardeñosa, Arconada y Platini, Seúl... Uno tras otro. No nos salía nada bien.
Y llegó usted y La Roja gana siempre. ¿Es talismán?
No. Soy afortunado por estar en el momento oportuno y el lugar adecuado. ¡Ya me gustaría ser talismán! Eso lo son los jugadores, la mejor generación de la historia del fútbol español.
Además, de contar La Roja, hace cada fin de semana 'Carrusel'. ¿No se estresa?
La Roja es el equipo de todos y Carrusel, el sueño de cualquier periodista. Y aunque es sacrificado y tienes menos tiempo libre, lo he elegido yo, es algo por lo que merece la pena sacrificarse. Ya descansaré. Esto lo firmaba de siempre. ¿Quién no?
¿Le queda algún sueño deportivo por cumplir?
Haber narrado el gol de Iniesta estaría muy bien (risas). El de Brasil 2014 en Macaraná, en una final España-Brasil, no estaría mal, eh. Y unos Juegos también son especiales. Un oro en baloncesto… Hay mucho donde elegir pero, este país es muy futbolero, y un triunfo de España en un Mundial es lo más.
¿Contar en la tele los goles de España en una Eurocopa o comentar la carrera de Bolt en Londres para la radio?
Los goles de España. Sin duda. Eso está fuera de concurso. Pero la trascendencia de Bolt te pone los pelos de punta. Recuerdo estar en Londres, de pie en el Olímpico, y esos 10 segundos... Dices: “Que se pare el mundo...”.
El gol de Torres en la final de la Eurocopa 2008... ¿Qué siente cuando lo escucha?
Me acuerdo de los que estábamos ahí. Relaño, Camacho, Maldini… Era la primera vez, el Podemos, todo un país con el Podemos, creyéndose que podíamos… Qué recuerdos... Me viene mucho a la cabeza el día de Italia. Ese día cambió la historia del fútbol español. Los cuatro fantasmas que había se esfumaron. Lo del 22 de junio, lo de los penaltis, lo de Italia y lo de cuartos. Los cuatro gafes, fuera. De un plumazo. En un día. Ese día.
¿Ha vuelto a ver los partidos de aquella Euro?
He visto trozos, los tengo en casa, pero nunca me he sentado y he dicho: “Voy a verlos”. Y tengo ganas, muchas, de volver a ver la segunda parte de España ante Rusia en semifinales. La recuerdo como un disfrute. Con Cesc, Xavi, Xabi, Iniesta… Qué forma de jugar, ¡madre!, en mi vida había visto jugar al fútbol así, ¡en mi vida!, qué segunda parte, parecían los Lakers de Magic, Cooper y Scott...