REAL MADRID 1 -ATLÉTICO DE MADRID 2
El Atlético, ciclo triunfal de cinco títulos ganados en tres años
Sumó su quinto título en los últimos tres años, en un ciclo triunfal que comenzó el 12 de mayo de 2010 en Hamburgo, con la Liga Europa.
El Atlético de Madrid, ganador hoy de la Copa del Rey ante el Real Madrid (2-1), sumó su quinto título en los últimos tres años, en un ciclo triunfal que comenzó el 12 de mayo de 2010 en la ciudad alemana de Hamburgo, con la Liga Europa, y que prosiguió hoy con el trofeo alzado en el Santiago Bernabéu.
Una Liga Europa más, el 9 de mayo de 2012, y dos Supercopas continentales, a finales del mes de agosto de 2010 y 2012, completan la lista de éxitos coleccionados por el conjunto rojiblanco en los tres cursos más recientes, culminados hoy con la Copa contra el ''eterno'' rival, que agranda una temporada excelente del equipo, también clasificado para la Liga de Campeones de la próxima campaña. Todo comenzó hace tres años: el 12 de mayo de 2010 en el Hamburgo Arena, el lugar desde el que recuperó un sitio en las primeras páginas del fútbol europeo.
Dos goles del uruguayo Diego Forlán, el último de ellos en la prórroga (2-1), definieron el duelo ante el Fulham y coronaron como campeón al equipo madrileño. El entrenador era Quique Sánchez Flores, que alineó de inicio a David de Gea; Tomas Ujfalusi, Luis Amaranto Perea, Álvaro Domínguez, Antonio López; José Antonio Reyes, Paulo Assuncao, Raúl García, Simao Sabrosa; Diego Forlán y Sergio ''Kun'' Agüero. También fue el técnico del siguiente título: la Supercopa de Europa ante el Inter.
El 27 de agosto de 2010, contra un rival que lo había ganado todo ese año, el Atlético completó un partido sobresaliente, transformado en victoria con goles de José Antonio Reyes y ''Kun'' Agüero en el segundo tiempo. El 0-1 fue en el minuto 62; el 0-2, en el 83. El portero David de Gea, incluso, detuvo un penalti en la prolongación.
Además del cancerbero, que una temporada después pondría rumbo al Manchester United, también jugaron de inicio Tomas Ujfalusi, Luis Perea, Diego Godín y Álvaro Domínguez, en defensa; José Antonio Reyes, Paulo Assuncao, Raúl García y Simao Sabrosa, en el centro del campo; y Diego Forlán y Kun Agüero, en la delantera. Después de prácticamente dos años de sequía, el equipo retomó la senda del éxito en la Liga Europa de 2012.
Sólo repitió Godín en el once respecto a la anterior final y el Atlético se impuso con una autoridad incontestable al Athletic Club en el estadio Nacional de Bucarest con un encuentro sensacional del colombiano Radamel Falcao. Marcó dos goles. El primero, en el minuto 7, con un perfecto disparo, con efecto, a la escuadra de Gorka Iraizoz, y el segundo en el 34, con una acción ingeniosa del atacante, que controló el balón al borde del área pequeña, de espaldas a la portería, se fue para un lado, cambió hacia el otro y batió al portero bilbaíno.
Su impecable partido, merecedor del premio al mejor jugador de la final y definitivo para la consecución de su segundo trofeo de máximo goleador seguido en la Liga Europa, encarriló el triunfo del Atlético, completado con el 3-0 anotado por el brasileño Diego Ribas, que regateó a un par de rivales y que cruzó su disparo.
El argentino Diego Simeone ya era el entrenador. El técnico alineó de inicio en ese duelo a Thibaut Courtois; Juanfran Torres, Joao Miranda, Diego Godín, Filipe Luis; Gabi Fernández, Mario Suárez; Adrián López, Diego Ribas, Arda Turan; y Falcao. Eduardo Salvio, Koke Resurrección y Álvaro Domínguez entraron al final. Si Falcao brilló en Bucarest, el 31 de agosto de 2012 en Mónaco, en la Supercopa con el Chelsea (1-4), deslumbró a todo el mundo.
Su encuentro fue sublime. Sus tres goles en el primer tiempo, en una fantástica exhibición rojiblanca, lanzaron a la cima al Atlético, que hoy mantiene su ciclo ganador: cinco títulos en tres años.