La intrahistoria
La comida de Filandón refleja los grupos del vestuario blanco
Las reuniones de los futbolistas suelen ser signos esclarecedores del estado de un vestuario. En una mesa sólo había españoles y en otra sólo se sentaron extranjeros.
Las reuniones de los futbolistas, ya sean comidas o cenas, suelen ser signos esclarecedores del estado de un vestuario. La conjura de Filandón del martes sirvió para comprobar la división existente entre la plantilla del Madrid y el cuerpo técnico. Pero la división de las mesas también ha ofrecido datos significativos sobre la empatía, estatus y afinidad de los jugadores madridistas.
La plantilla se repartió en tres mesas. La primera podría ser considerada como la de los pesos pesados, en la que se sentaron los 'señalados' por Mou (Ramos, Casillas, Cristiano y Pepe), Coentrao, Higuaín, Chendo (el delegado) y el fisioterapeuta Pedro Chueca. Este es el grupo más opuesto al técnico y en él queda patente la influencia que ha adquirido Cristiano dentro del vestuario. La segunda mesa fue en la que se ubicaron el grueso de jugadores españoles y los canteranos. Mientras que en la tercera se sentaron la mayoría de los jugadores extranjeros.
Por otra parte, Punto Pelota desveló el llamativo cartel que se colocó en el vestuario: "Martes 14: Comida. Jugadores, médicos, fisios... TODOS". En ella no se excluyó al cuerpo técnico, pero tampoco se le citó de forma explícita...