Manchester City - Wigan: David vs. Goliat en la final de la FA Cup

Prepárense para otra ración de David y Goliat. El City se enfrenta a un rival que está a 40 puntos de distancia y 16 lugares por debajo en la liga inglesa. Mientras que el Wigan, en los últimos doce meses, ha ingresado más dinero en ventas que lo que ha gastado, el City llega invertidos 1.200 millones de euros en la plantilla y la infraestructura del club desde la llegada de los nuevos dueños en 2008. El equipo de Roberto Martínez está involucrado en una de las batallas por la supervivencia más absorbentes y tensas de los últimos años, mientras que el City hace ya semanas que no se juega casi nada y ya el mes pasado Mancini aceptó resignado la victoria del United en liga.

El Wigan de Roberto Martínez vive esta semana con una mezcla de depresión tras la derrota ante el Swansea, que le complica la vida, y de trepidación por su primera aparición en la final de la copa, que le garantiza su presencia en el Europa League la temporada que viene. Sin embargo, la mitad de la conferencia de prensa de Roberto la pasó respondiendo preguntas sobre el posible interés del Everton. "Es una pérdida de tiempo. Sólo pienso en la salvación", afirmó repetidamente. Tras la final, el martes necesitará al menos un punto de su visita al campo de Arsenal: el calendario no perdona. Ni tampoco las finanzas: ganar la copa supone unos cuatro millones de euros y estatus de leyenda; permanecer en la liga, unos 46 millones de euros y la satisfacción del trabajo cumplido. Difícil elección pero Martínez lo tiene claro: el objetivo es seguir en la Premier.

El conjunto del catalán llega con muchas ausencias (Albert Crusat y Iván Ramis, entre otros, aunque podría recuperar a Antolín Alcaraz) y Roberto Mancini tendrá que recordar a los suyos que necesitó de un gol a última hora de Carlos Tévez para vencer a su rival de hoy en el Etihad, aunque el Wigan no ha conseguido marcar un solo tanto en sus últimos siete encuentros, todos ellos derrotas. Es prácticamente seguro que ni siquiera una victoria en la copa suponga la continuidad del italiano.