Borussia Dortmund
Klopp continúa su cruzada contra el futuro Bayern de Guardiola
"No temo que la Bundesliga sea de dos como la Liga, sino que sea de uno, como Escocia con el Celtic tras la degradación del Rangers, y que todos los jugadores vayan al Bayern".
En el método Klopp todo está calculado aunque su estilo parezca callejero. Esa es la leyenda impresa en la gorra que siempre lleva. Pöhler (jugador de la calle). Su dialéctica es chabacana, sí. Y directa. "Me apuesto el culo a que Sammer quiere hablar con Guardiola", dijo tras el sorteo provocando la iracunda respuesta de Rummenigge: "Si se hubiera apostado el pelo trasplantado sería más fácil de transportar. Lo que es seguro, es que su culo acabará en el museo del Bayern". No iba en broma Klopp con aquello que dijo: "Quiero ser el Mourinho de Guardiola en Alemania". Ya calienta. Ayer, en respuesta a la petición de "un sistema a la española" por Hoeness, por el reparto del pastel de la televisión, Klopp significó: "No temo que la Bundesliga sea de dos como la Liga, sino que sea de uno, como Escocia con el Celtic tras la degradación del Rangers, y que todos los jugadores acaben en el Bayern". ¿Se refería a Lewandowski?
Nadie negará su excentricidad, pero tampoco su dialéctica y la defensa de un fútbol del pueblo. Se viste de Papá Noel en Navidad, visita las peñas de aficionados, va a hospitales. Klopp es una marca. Tiene siete contratos publicitarios por los que cobra un millón y medio al año. Y triunfa su estilo ("rápido de cabeza y piernas, todo a máxima velocidad") y su método cercano a las nuevas tecnologías.