Las Palmas sale invicta de Vallecas y logra pasar de ronda

La tradición se cumplió y Las Palmas eliminó al Rayo de la Copa. El equipo franjirrojo nunca había ganado al amarillo ni uno solo de los cinco partidos previos a este enfrentamiento y ayer no se produjo la excepción. El cuadro canario hizo valer el tanto de ventaja que traía del encuentro de ida y el empate a cero en Vallecas fue suficiente para que pasase de ronda.

Paco pidió paciencia a sus futbolistas en la previa y éstos le obedecieron al pie de la letra. El balón fue suyo la mayor parte del tiempo, pero sus jugadas se produjeron a trompicones y sin acciones claras ni en la elaboración ni en la finalización. Sólo hubo un remate rayista con evidente peligro durante la primer parte. Fue en el minuto 17 por mediación de Labaka, que encontró el brazo de Pignol en vez de la meta de Barbosa.

Las Palmas parece que ha arreglado el problema que tuvo en la defensa en los primeros partidos de la temporada. El equipo canario planteó inicialmente el encuentro para salir a la contra y se sintió cómodo sin tener que asumir el peso del encuentro. Aunque visto que el cuadro vallecano tampoco le inquietó en demasía, en la segunda parte se animó a dar un paso hacia adelante al percatarse de que el encuentro podía decantarse de su parte.

El que lo dio de verdad fue de nuevo Paco cuando dio entrada a Leo en sustitución de Labaka para dejar una línea de tres en la defensa, porque el Rayo tenía que marcar para mantener la esperanza de clasificarse. En una de esas, Chrisantus se plantó solo ante Rubén, pero el meta del Rayo salió de su área con el fin de parar el contraataque, aunque lo hizo con la mano fuera del área y, consiguientemente, el Rayo, como sucedió en la ida, se quedó en inferioridad numérica por la expulsión de su guardameta.

Otra mano de Chrisantus dentro del área al taponar un disparo de Casado tras una falta que botó Trashorras volvió a crear polémica. Pérez Lasa tampoco lo vio.

Lo que mató a Las Palmas fueron los fuera de juego, porque en alguno de esos rápidos contraataques podría incluso haber ganado el partido en Vallecas ante los riesgos asumidos por el Rayo.