CACEREÑO-MÁLAGA
Manuel Pellegrini tira del plan B
El chileno se deja a los titulares. En Cáceres causó cierta desilusión que el bombo copero no emparejase a su equipo representativo con el Real Madrid o el Barcelona.
En Cáceres causó cierta desilusión que el bombo copero no emparejase a su equipo representativo con el Real Madrid o el Barcelona. Pero contra todo pronóstico, la gente se animó. Cerca de 300 nuevos socios y más de 6.000 entradas vendidas hicieron plantear al director general, Ángel Marcos, la posibilidad de instalar gradas supletorias en el estadio Príncipe Felipe.
Pero la ausencia entre los expedicionarios malagueños de titularísimos como Joaquín, Isco, Saviola o Demichelis ha enfriado parcialmente las opciones de no hay billetes. Mas por otro lado, la excelente trayectoria del Cacereño (10 puntos de 12 posibles) y el convencimiento de que se puede luchar por ascender a Segunda División 60 años después, está poniendo los embriones de una nueva 'Cacereñomanía'.
El frenético ritmo de fútbol que lleva acumulado el conjunto boquerón ha obligado a Pellegrini a introducir numerosos cambios, a tirar del filial y a dejar en la capital de la Costa del Sol a ocho de sus habituales titulares. Oportunidad para ver por fin al estadounidense Onyewu, o minutos para Recio, Seba, Buonanotte o Santa Cruz, que poco a poco va cogiendo el ritmo que le faltaba.
Y día interesante para Manuel Pellegrini que hoy será, y nunca mejor dicho, el marqués de Cáceres. El chileno lidera la reivindicación de sus jugadores para cobrar lo que el club pactó el pasado verano. Son unos 10 millones de euros. Además, el chileno desea sacarse la espina en una competición donde Polideportivo Ejido y Alcorcón le dieron soberanos disgustos con Villarreal y Real Madrid. El Ingeniero no desea que se repita descalabro ante otro Segunda B.