El Lugo no sufre para vencer

El Lugo no sufrió en su campo para vencer aun flojo Mirandés (2-0) con un gol tempranero que supondría un dominio claro del resto del encuentro sin que el rival tuviese ni una sola ocasión de gol. Los locales asediaron la portería de Goitia desde el primer minuto y en el 3 Óscar Díaz ya estuvo a punto de conseguir abrir el marcador con un disparo cruzado raso desde dentro del área que detuvo el portero con algunos problemas.

Continuó el buen arranque lucense y poco después, en el sexto minuto de encuentro, Tonetto encontró el primer gol con un buen lanzamiento de falta desde unos 10 metros de la frontal a la altura del pico derecho del área. Su tiro pasó por encima de la barrera y entró casi pegado al palo más alejado del portero, que pudo haber hecho más, pero se quedó en su posición y el equipo de casa se colocó por delante en el marcador en un visto y no visto.

Los hombres que dirige Quique Setién siguieron con el peso del partido aunque no crearon tantas ocasiones en los siguientes momentos hasta que Pablo Álvarez tiró desde la frontal en el minuto 26 y estuvo a punto de sorprender al guardameta rival. El Mirandés seguía a lo suyo y el Lugo no estaba nada incómodo por la situación y así llegó el partido al descanso, sin ningún equipo con mucha intención de marcar, o al menos eso era lo que demostraban sobre el campo.

La segunda mitad empezó como la primera, con los rojiblancos arriba para conseguir ocasiones y que llegase el segundo gol que, visto lo visto, sentenciaría el partido como más tarde quedó patente en el terrero de juego. Una buena combinación desde la parte derecha en el minuto 50 hizo que Héctor Font pudiese tirar casi a bocajarro, pero el portero estuvo acertado aunque el despeje quedó en el área pequeña para que Pablo Álvarez lo rematase al fondo de la red, con lo que consiguió el segundo y definitivo gol.

La actitud del Mirandés continuó hasta que Lluis Codina optó por hacer una serie de cambios ofensivos y poner sobre el terreno de juego a Iríbar, Rúper y Díaz de Cerio, que llevaron más juego de ataque, pero no las ocasiones.

El que lo siguió intentando, aunque no consiguió anotar, fue Óscar Díaz, que primero probó con un disparo raso desde la frontal que salió rozando el poste y después volvió a tirar desde menos de veinte metros una falta que no acabó dentro de la portería por muy poco.