Los padres quieren lo mejor para sus hijos

Me tienen alucinado todos los palos que le han caído al señor padre de Radamel Falcao por haber dicho algo que deben repetir cada mañana en el mundo el 90% de los papás que son futboleros: "El sueño de mi hijo es jugar en el Real Madrid". Seamos sinceros: todos los padres normales del mundo quieren lo mejor para sus hijos. Y hablando de fútbol, ¿hay algo mejor que ser jugador del Madrid? Papá Falcao tuvo un ataque de sinceridad que le dignifica a él y a toda su familia. Son blancos de cuna y se nota. En Colombia hay mucho merengue y lo compruebo por la cantidad de vikingos colombianos que entran en mi cuenta de Twitter.

Puedo entender que a los atléticos les haya dolido que su indiscutible estrella tenga el ADN del club al que históricamente están enfrentados como el perro y el gato. Pero a mis amigos rojiblancos les diría que no tienen porqué ofenderse. Al Kun Agüero le pasó igual. Antes a Hugo Sánchez. Ser estrella en el Calderón significa que tienes muy cerquita el Bernabéu. Y ya se sabe que no son lo mismo los Premios Goya que los Oscar de Hollywood Papá Falcao es un padre que sabe de fútbol y de muy niño ya sabía que el Millonarios de Bogotá vino a jugar a Chamartín con Di Stéfano al frente (1953). En Colombia aún se habla de aquel partido. Papá Falcao ha visto como su hijo crecía viendo el gol de Zidane en Glasgow y las paradas mágicas de Casillas. Normal que el chaval sueñe con el Madrid. Y que el padre quiera lo mejor para su hijo. ¿Hay algo de malo en ello?

Ayer repitió Papá Falcao que lo que dijo no es un pecado y es hora de defender a este buen hombre. Ya está bien de hipocresías. Falcao es feliz en el Atleti y agradece a su afición el cariño que le dan. Pero sabe que la celebridad sólo la alcanzará con la camiseta blanca. Con ella jugaría la Champions, algo que en el Atleti es una utopía a día de hoy. Por cosas como ésa, se fue el Niño Torres a Liverpool Papá Falcao, le invito al Bernabéu cuando quiera. Allí verá a su hijo jugando de blanco algún día...