"Aquí ya no se compra ni una camiseta de Modric"

Nos acercamos a White Hart Lane, el mítico estadio del Tottenham, para palpar el ambiente de la afición sobre la marcha de Modric al Madrid. La tienda oficial está abierta, pero la primera sorpresa es que fuera, en el escaparate, ha sido eliminada la imagen del croata aunque es aún uno de los estandartes de la entidad. Como reclamo en esa fachada principal en la que el año pasado lucía con grandeza la figura de Modric, ahora aparecen las de Walker, Parker, Bale y Van der Vaart.

Cuando se accede al interior ocurre igual. Ya están colocados los nuevos uniformes, todas las prendas con el nuevo diseño de la marca que acaban de salir a la venta. Y en cada departamento hay carteles publicitarios con algunos jugadores que muestran las diferentes prendas, en pequeñas o grandes fotografías, para exhibir el género. Modric no aparece por ninguna parte. Además de los anteriormente mencionados se puede ver a Dawson, pero nada del mediapunta que pretende el Madrid. El Tottenham no ha querido arriesgarse en esta campaña publicitaria y lo da por perdido.

No hay demanda. Ocurre una situación curiosa con los dorsales, que aún no son definitivos (lo serán una semana antes de que empiece la Premier). Sólo algunos se pueden serigrafiar y ahí sigue el 14 de Modric con el que la entidad intenta hacer caja en estos últimos momentos. Pero un empleado, Phil, que además nos confiesa en voz baja ser hincha del Arsenal (rival antagónico de los Spurs, puede que por eso se permita hablar con nosotros), nos da una clave: "El año pasado la camiseta de Modric fue la más vendida con diferencia. Este verano no hay nada que hacer. Desde que se conoció que el jugador había pedido el transfer request no se vende ni una camiseta suya".

Dentro del club, todos han cerrado filas en torno al asunto. Con Daniel Levy fuera de Londres durante los últimos días, nadie más tiene capacidad negociadora ni quiere abrir la boca sobre el tema. Donna Cullen, su mano derecha, que es también directora de comunicación, se limitó a decir a AS: "Nadie aquí le dirá nada sobre el tema. El Tottenham no tiene costumbre de hablar sobre transferencias de jugadores ni rumores". Y quedaron prohibidas cualquier tipo de entrevista, incluso hablar de Modric tras el encuentro que el Tottenham disputó ayer por la tarde contra el Stevenage, de la Segunda B inglesa.